Pasó el amor...

Tiembla el silencio al espejarse en la lágrima

que calladamente ha de caer por las mejillas,

una gran culpa que caerá adentro del alma

haciendo danzar a la tristeza alrededor de mi vida.

Ya no habrá un ritual para revivir a las palabras

solo una sombra para que corra todo de prisa,

un sueño que se morirá en su propia trampa

y todo olerá a misterio y se vestirá de enigma.

Una vida dentro de mi vida que me fue arrancada

como a una ausencia que ya no se necesita,

en un tiempo que me agita tan lleno de nada

con un ayer que mi memoria nunca olvida.

Todo se desvanece como una última mirada 

donde todo es pecado en una pasión dormida,

y en mi sangre que se mueve envenenada

pasó el amor y, al irse, se llevó a lo mejor de mi vida...