El rubor que fabrica el cruce de miradas
en el mismo tiempo que el aleteo de un colibrí,
que liba suspendido frente a una campanilla
del lindo color rojo carmesí.
¡Qué visión tan definitiva
y tajante lapidaria expresión!
A pesar de tu misma figura,
escondes en tus ojos una pasión.
¿Quién te has creído que eres, mi niña,
con esa perspectiva enigmática de tus ojos,
que proyectan rayos irisados de color añil?
No me lo digas, que me gusta
cuando me ojeas de soslayo,
acarreando una larga fusta,
con la que arreas a tu caballo.
Y en lo alto de tu montura,
un ligero roce y un giro sutil,
con el que me llega un trozo de ternura,
como las alteraciones de abril.
De este modo puedo pensar que me observas,
con una clara y lisonjera pasión,
como si de mi quisieras, a tiras,
arrancarme de cuajo el corazón.
No se esconde ni para los sordos,
el ruido que se produce cuando amas,
como una rama que cruje con el viento
dando golpes en las ventanas.
Sintiendo el roce de tu piel de algodón
un leve jadeo caracoleando en el oído,
piensas que los vaivenes como olas son
y sinfonías melodiosas los sonidos.
Así el hombre, desesperado con sus ilusiones,
despierta del sueño que producen
la mirada de tus ojos burlones
e irisados de color añil.
Poem & Rhápsody ©
La fina piel de la cáscara
Alfonso J. Paredes
Imagen de StockSnap en Pixabay
De uso gratuito bajo la Licencia de contenido de Pixabay
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Autor:
Alfonso J Paredes (AlyParCa) (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 6 de marzo de 2025 a las 14:06
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 26
- Usuarios favoritos de este poema: Alexandra l, Tommy Duque, alicia perez hernandez, La Hechicera de las Letras, Ricardo C., Mujer perseverante, EmilianoDR, Emilia🦋, Enrique Fl. Chaidez, El Hombre de la Rosa, Llaneza, María C., 🌼⚘María García Manero ⚘🌼, JUSTO ALDÚ, Pilar Luna
Offline)
Comentarios7
Es un bellísimo poema, sensualidad y erotísmo refinado, un verdadero placer de lectura, gracias por compartir.
Feliz tarde, Alex.
Me alegro de que te haya gustado, querida Alexandra. Eres muy amable y generosa en tu comentario, hecho que me congratula. Sludos
Se nota que se quiso plasmar esa tensión entre la admiración y el deseo de desenmascarar lo que hay detrás de una mirada. Esa mirada burlona, ese juego entre lo que se muestra y lo que se oculta. Me parece se quiere capturar esa chispa fugaz, ese cruce de miradas que incendia, pero también deja al otro en la incertidumbre, preguntándose si está ante una caricia o ante una fusta a punto de caer.
La emoción está clara: una atracción que es juego y es reto, que no se conforma con la simple dulzura, sino que exige riesgo. Y ahí radica su fuerza. Podría pulirse más, sí, pero lo que transmite, esa mezcla de fascinación, deseo y un poco de incertidumbre, es lo que lo hace vibrar. Y eso es lo que importa.
La única mancha negra según mi persona, es que en ciertos pasajes, la construcción de las frases resulta forzada o innecesariamente rebuscada, afectando la fluidez y naturalidad del ritmo.
La Bruja Irreverente.
Muchas gracias por su lectura y posterior excelso análisis. Me congratula su dedicación y sinceidad, circunstancia que prefiero de una crítica, al comentar mis humildes letras. Reciba un cordial saludo y vuelva cuando desee.
¡Tu poema es muy hermoso! Un torbellino de sensaciones que juega con la naturaleza, el misterio y el deseo... Gracias por compartirlo.
Me alegro de que le haya gustado, Ricardo. Gracias por pasarse a leer mis humildes letras. Saludos.
Bello y sensual poema, saludos
Muchas gracias, Ramón. Un placer tu presencia. Saludos.
La genialidad alumbran tus bellas estrofas estimado poeta y amigo Alfonso
Un abrazo de tu amigo Críspulo desde Torrelavega
El Hombre de la Rosa
Eres muy amable, Críspulo. Ya te conozco desde hace tiempo y siempre es agradable tu presencia y comentarios. Saludos.
hermoso homenaje a esos preciosos ojos irisados de color añil
Un saludo
Es una imagen que transmite profundidad, como profundo es mi agradecimiento por tu presencia, María. Saludos.
Muy buena rima, es un honor leerlo.
Saludos.
El honor de su presencia es mío, amigo Agustín. Saludos cordiales.
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