Te quiero dejar atrás, pero siempre
encuentras la manera de llegar y tocar
la parte sensible que me impide avanzar.
Otro día fugaz donde sigo siendo incapaz
de aceptar que odio repetir las mismas piezas.
Soy el pintor desde el primer día, es mi trabajo
darle color a cada verso que cae por debajo,
dejando hoyuelos en la felicidad. ¿Pero soy feliz?
¿O solo aparento sentirme genial mientras
las mentiras gotean y no puedo llorar al tenerte cerca?
Lucho contra demonios y pierdo princesas,
divago en una realidad alterada en mi conciencia.
Ella dice que parezco una figura viva y muerta;
estoy vivo en la poesía, pero muerto en la realidad,
tratando de respirar y haciéndolo demasiado mal.
Amo la crudeza de tus palabras dulces y frías,
siento que mi sonrisa deja de ser solo artificial.
Perdido en un juego donde ambos somos lo mismo;
una persona mirando a muchas más en un espejo roto,
luchando, pero cediendo ante la bendita oscuridad.
Estamos cansados de luchar, y puede que sea el final.
Cariño, no logré avanzar, jamás pude sacar el puñal.
Aún conservo el recuerdo gélido y las llamas del mal.
Lo siento, no puedo sonreír mientras estoy muriendo...
Cada vez en mayor cantidad y con demasiada facilidad.
-
Autor:
Tephros (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 12 de marzo de 2025 a las 23:29
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 12
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.