“No te hice nada”

“No te hice nada” es algo que he escuchado hasta el cansancio… es una frase tan hiriente como si fuera otro explícito insulto.

Es la frase favorita para aquellos que hieren en silencio, que ignoran, que muestran una brutal indiferencia ante la mera existencia de uno, siendo reducido a nada.

Esa mustia expresión, como amarrarse el dedo antes de la cortada, solo muestra un profundo dolo, esa necesidad de causar dolor muy intencionadamente, pretendiendo la peor fingida inocencia, disfrutando en silencio tu dolor.

¡Cuidado si lo expresas! Porque “no te hicieron nada”, y uno es el que “está mal” , “imagina cosas”.

Al final, su existencia terminará por también ser nada para mi, dándole menos valor que nada, como un ente transparente que no merece ser visto ni escuchado por nadie. Ese es su valor real, nada.