Buscaba tan solo respuestas
y solo fui hallando silencios,
fui despertando dormidas ausencias
deshojando a cada uno de mis versos...
Traté de contar a las estrellas
de no mirarme frente a un espejo,
quise olvidar las palabras aquellas
acercarme, de donde hoy estoy tan lejos...
Opte de buscar las mil maneras
de escapar de mis propios miedos,
le di cobijo a un conjunto de penas
y le di rumbo a mi destino, a lo incierto...
Transite entre las cosas malas y buenas
sentí el temblor en la punta de mis dedos,
soñé en muchas noches de luna llena
y me di al pecado con todos mis deseos...
Fui rebelde con mis propias guerras
como fui frágil por fuera y por dentro,
puse algo de soledad en mis quimeras
y dejé que la lluvia apagara todo mi fuego...
Nunca quise que nadie me quisiera
la imprevisión en mí era como un juego,
de mi sombra siempre estuve alerta
porque la oscuridad es como un lobo hambriento...
Vi en mí las lágrimas de la tristeza
sin querer me fui poniendo más viejo,
me fui llenando de pronto de paciencia
y fui dándole verdad a todos mis secretos...
Fui el juez de mis propias sentencias
me condené varias veces al sufrimiento,
creí en falsos dioses y en vanas promesas
y me costaba creer en todos mis sentimientos...
Di pasos equivocados en la niebla
muchas veces traté de que parara el tiempo,
en mi laberinto no supe abrir las puertas
y me sentí como aquella ave que ya perdió su vuelo...
Hoy mi vida es esta presencia
donde solo soy un hombre demasiado imperfecto,
donde tan solo buscaba respuestas
y tan solo fui hallando callados silencios...
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Autor:
Jorge L Amarillo (
Offline)
- Publicado: 21 de marzo de 2025 a las 10:57
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 14
- Usuarios favoritos de este poema: Jorge L Amarillo, Alfonso J Paredes, EmilianoDR, Mauro Enrique Lopez Z., JacNogales, alicia perez hernandez
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