Te guardaré como una vieja añoranza
en la sepultura fría de mis silencios,
detrás del ocaso inerte de mi vida,
en la evidencia trémula de mis huesos.
Te llamaré como se llama a lo eterno
cuando la palabra acalle los sentidos,
crecerá como un tulipán en invierno
está morriña niebla de mis latidos.
Iré trás el rastro ambiguo del otoño
ese qué coronó con nardos tu frente,
esa imagen tuya qué yo tanto añoro
la última estela también se desvanece.
Aquel amén de mi boca se perpetúa
en este resuello de la noche inmensa,
ahí tus ojos negros y los míos se encuentran
y por un instante el amor nos acerca.
Te vi hecha de sudor, sombra, viento y sangre
con tu miel besaste el vacío de mis labios,
eras aquel astro azul al caer la tarde
cantan tu romanza en el parque los pájaros.
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Autor:
Escritor Nocturno (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 28 de marzo de 2025 a las 14:07
- Categoría: Amor
- Lecturas: 31
- Usuarios favoritos de este poema: Francisco Javier G. Aguado 😉, Tommy Duque, pasaba, ElidethAbreu, alicia perez hernandez
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