Novela Corta: Caja de Pandora
Por: Srta. Zoraya M. Rodríguez Sánchez
Seudónimo: EMYZAG
Comenzada: 3 - 4 de abril de 2025…
Publicada: 4 de abril de 2025…
Terminada: 4 de abril de 2025…
Editada: 4 de abril de 2025…
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7021 Palabras 10 Páginas
~ * ~Sinopsis:
~ * ~Una pareja feliz y de tez del color blanco se casan en un lindo paisaje africano. Tanto Peter como Jane cuando regresan de esa estadía de luna de miel en el continente africano Jane regresa embarazada, y cuando puede parir la criatura el niño le sale de color negro…
Sucesos:
- Peter y Jane se casan en el continente africano…
- La luna de miel es en el continente africano…
- El amor y la pasión de ésta pareja se sienten tan enamorados…
- Peter y Jane se enamoran más y hacen el amor a la orilla de la playa en el continente africano…
- Peter y Jane regresan a los Estados Unidos a hacer su vida normal…
- Peter y Jane serán padres, Jane está embarazada de Peter…
- Transcurren más de nueve meses contentos y felices en la espera de su primogénito…
- Jane esta a punto de parir… y es una osadía llevar a la mujer al hospital…
- Jane puede parir la criatura, pero, en vez de salir de color blanco sale de color negro….
- Jane y Peter se conforman con la caja de pandora, lo que trajo la caja de pandora y la sorpresa de esa criatura y se quedan enamorados de ese ser de color negrito…
Peter y Jane son una pareja que no es dispareja. Ambos tienen una relación excelente y se llevan de lo más bien. Peter y Jane se hallan en el continente africano para celebrar una boda, un enlace y un santo matrimonio. Peter y Jane se van de rumba, de fiesta africana, y de jolgorio africiano. La vida es feliz para Peter y Jane en el continente africano. La boda está al estilo de la vida africana con tambores y maracas en un barrio por allá en el continente africano. La Tierra llena de polvo, los tambores y maracas, cantan al unísono para entonar una fiesta de un enlace matrimonial entre dos americanos. Peter y Jane se sienten en la sola encrucijada de ser completamente felices. La pareja se casó en un enlace matrimonial perfecto, la ceremonia fue con un juez, la celebración con tambores y maracas, y con una fiesta africana cansando hasta el alma. La vida para Peter y Jane fue buena y excelente y el enlace matrimonial fue un tremendo jolgorio africano. El baile para Peter y Jane fue muy bonito con una coreografía ensayada de días anteriores, bailando y demostrando que no tienen dos pies izquierdos. El baile con luces de colores atrae todas las vistas y todos los ojos que están invitados en ese gran jolgorio para la celebración del enlace nupcial entre Peter y Jane. Peter y Jane se dan el gran bailecito de sus vidas. Peter y Jane bailan al unísono de tambores y maracas. Es un día muy feliz, desde que se visten de gala y ¨glamour¨ para celebrar el gran enlace nupcial y el santo matrimonio en el continente africano. Si Peter y Jane se casan en el continente africano, llevan alegría y su feliz encuentro en el continente africano. La boda fue de ensueño y de una magia trascendental que sólo llevó a los novios por el sendero mágico de bailar con los tambores, maracas y con la mbira, el cual, es el instrumento del sur del continente africano. La pareja lleva la magia al ritmo de la salsa, rock & roll, y del rhythm and blues a la ceremonia en el continente africano y realizan un tremendo festín por el enlace nupcial entre Peter y Jane. Peter y Jane se casan un día sábado donde el festín en un confín de buenos momentos se ve llegar con buenos ojos de ilusiones gratas. La vida para Peter y Jane se siente como en casa en el continente africano, dejando atrás la mesa donde el champagne y el vino y el cóctel se vio llegar y hacer desaparecer con la jartera que se dieron los invitados dejando atrás el banquete de recién casados. La vida para Peter y Jane se enfrascó de una bella ceremonia a celebrar en el continente africano la pasión, la vehemencia y las ilusiones se dieron al compás de tambores, maracas y la mbira. La vida para Peter y Jane se enfrascó en un sólo mal tormento cuando en la alegría de esa feliz ceremonia se vio felizmente la pareja que se casó y contrajo nupcias en el continente africano. El continente africano feliz como siempre por celebrar una boda, un enlace nupcial, y un santo matrimonio en la Tierra africana se llena de fervor y de iras conceptuales, de felicidad y de un feliz momento cuando ocurre y transcurre una sola ceremonia cuando ocurre el amor, la pasión y la vehemencia ardiente en obtener el poder del amor y de la linda pasión por celebrar una sola rica verdad inocua en celebrar sólo un enlace nupcial y en celebrar un santo matrimonio en el continente africano. El amor y la pasión en el solo corazón de Peter y Jane no se detiene la fuerza y el amor en contra del dolor, cuando se ama a conciencia cuando en el alma y en la pasión se desviste de emociones y de ilusiones cuando en el continente africano unen sus vidas en sentido amoroso. El amor y la pasión es feliz de un sólo momento cuando la pareja se da el, sí, acepto ante un juez en el continente africano. Y la vida y el amor se atormenta en enfrascar el alma y el amor en el corazón cuando se emana como nunca antes deseando abrir el tormento hacia nuevos valimientos de buena suerte sólo siendo feliz casándose en el continente africano. La vida de Peter y Jane se aferra al buen sentir y siendo feliz en el alma y más en el corazón y amando como nunca.
La luna de miel de Peter y Jane es en el continente africano. Peter y Jane esa noche de bodas se aman como nunca antes. La noche es una noche impetuosa, llena de lluvia después de ese majestuoso sol que salió por el día en la celebración del enlace nupcial. Peter y Jane se aman con una vehemencia carnal y una pasión indestructible que no se puede ni se debe de acechar en ser destructible. Ambos en el continente africano se sienten como un sólo desafío que se encrudece de tiempo y de amores clandestinos en el solo corazón. El amor entre Peter y Jane se siente como el paisaje africano con palmeras y con Tierra en polvo. Si en el embrague de amar, lo que encrudece de tiempo y la noche de bodas como la luna de miel entre Peter y Jane. La vida de Peter y Jane se debate en un sólo amor en esa sola habitación donde se aman una y otra vez si ya lo ebrio pasó de toda una celebración de día nupcial logrando llegar la noche para amarse en la luna de miel, sí, en la noche de bodas. Si el amor entre Peter y Jane se debate a partir que la vehemencia y la pasión llena de una emoción grata como el ingrato es el tiempo que se escurre en demasiado corto mal tiempo. La linda y buena relación entre Peter y Jane se cuece entre la buena salud y la bella relación entre dos amantes que se aman a consecuencia de la sola razón y del solo corazón como una sola verdad insistente de creer en el combate de dar con un sólo sentimiento dulce como la misma miel en la piel. La buena relación entre Peter y Jane se debe a que la risa entre dos enamorados es la linda pasión que se desviste en una cálida habitación donde se cuece el alma y el solo corazón enamorado de la vida y del verdadero amor. Si el alma y el corazón se debe a que la razón se pierde en la locura cuando se ama en verdad, si, entre Peter y Jane existe un sólo amor y tan verdadero como la fugaz estrella en el mismo cielo. Si faltó un sólo amor en el alma y más en el solo corazón derrumbando la era y la conmísera mala atracción de creer que no se amará jamás como una verdadera pareja y tan enamorada. La luna de miel se siente en el alma y más en el corazón transcurre más de media semana en el continente afriacano con tambores, maracas y mbira, sí extremadamente quedó el amor como un solo festín en un confín de estrellas fugaces en el sólo cielo. Peter y Jane son los grandes enamorados de la vida y más con la visita hacia el continente africano, como un nuevo festín de una fiesta entre tambores, maracas y mbira. La luna de miel traspasó fronteras, murallas y hasta sentimientos gratos en querer sublevar a la razón de tiempo y por una sola locura en volver a amar. Si en el alma y más en el solo corazón se debate de risas, confines y un festín de un frenesí de lluvia fría, sí, en el continente africano. Porque cuando en el alma y más en el suburbio del corazón se enfrascó a la idea mortal de quererse y amarse hasta el fondo del alma y del solo corazón amando como nunca antes. Peter y Jane se aman como nunca en otra noche más en el continente africano y se siente como el paisaje inerte entre las palmeras y la Tierra en polvo. Peter y Jane caminan por la Tierra africana tan prometida como la de la vida misma. Y transcurren dos semanas de luna de miel con tambores, marcas y mbira, entre acordes y rumba y soneo pasaron por el continente africano y más por la Tierra prometida en querer solventar la vida y más que eso la única fuerza en querer sublevar a raíz de Tierra como la más vil de las fortalezas en amar y enredar el amor en el solo corazón entregando alma y corazón en el amor a cuestas de la sola razón cuando en el suburbio del corazón se siente como se debe de amar en una luna de miel con toda miel en la piel.
Tanto Peter y Jane y su relación se debe a que se aman como una pareja de enamorados. La vida entre ellos dos trastoca cuando se conocen desde hacía dos años atrás en una discoteca donde se bailó al ¨rhythm and blues¨ un baile y un ritmo típico de los afroamericanos. La pareja se conoció en esa discoteca, bebiendo de sus propios ojos el amor y del corazón el ritmo cardíaco de un amor a primera vista. El amor renace y vive en el alma y más en el corazón amando como nunca antes a nadie, si en esa discoteca se vio el ritmo y el baile en el solo corazón. La furia de un solo amor en el corazón enalteció de fondo en querer amar al solo corazón entretejiendo una sola telaraña para el solo amor. Y el amor de Peter y Jane se forjó en el alma y más en el solo corazón una sola fuerza en el alma y más en el solo corazón con una fortaleza en un frío destino que sin saber si tendría frutos o no, se aman como nunca. La vida comenzó para Peter y Jane en una discoteca y ha culminado en un enlace nupcial en el continente africano. En el continente africano se ha llevado a cabo la boda o enlace matrimonial entre Peter y Jane y han pasado la luna de miel fantásticamente fabulosa y sin ningún pormenor de enfrascar malos tiempos. La vida de Peter y Jane en el continente africano se llevó a cabo como una boda nupcial fabulosa y muy atrayente a la idea de ver al cielo como un techo universal y no como un mal tiempo de nubes grises si hizo y creó el cielo a todo un sol majestuoso dando preámbulo a una linda y bella ceremonia en el continente africano. Peter y Jane ambos enamorados se sienten y se perciben como la gran idea, de ver y de creer en el amor a toda costa de la única verdad. Peter y Jane se sienten como los dos más enamorados de todo los tiempos venideros y pasados, cuando en el ámbito de la verdad se aferró el amor a la mágica idea de creer en el amor verdadero en el alma y más en su solo corazón. Peter y Jane solos quedan con su eterno amor en el solo corazón cuando una noche fría de verano deciden unir sus vidas y más en santo matrimonio, pero, debe de ser en el continente africano, porque ellos creen que el mundo exterior es más bello y sí que lo es. Tanto Peter y Jane y los dos enamorados hacen un viaje al continente africano para unir sus cortas vidas en una extensa vida juntos. Si Peter y Jane quieren enamorarse más y más y saber que el deseo se convierte en un trance perfecto de amar al alma y más al solo corazón de entregar la vida y la razón. El corazón de Peter y Jane se aferran a la idea de amarse más y más cuando la verdad quedó como el dolor en el mismo corazón cuando con travesía en mente reservan en un hotel en el continente africano la estadía de una ceremonia nupcial que pronto será la obra majestuosa de todos los lindos eventos celebrados en el continente africano. Peter y Jane quedan como la pareja más enamorada de todos los tiempos y en el continente africano es donde unen sus vidas en un santo matrimonio y que es para siempre. Peter y Jane quedan a la deriva de ese sueño real cuando es toda la linda realidad de creer en el trance directo y con la fría verdad que se casarán en el continente africano. Peter y Jane se van de travesía y de estadía en un hotel en el continente africano para celebrar su unión más extensa que es el santo matrimonio. Peter y Jane se enfrascan a la idea mortal y más efímera de todos los tiempos en que ese amor es para siempre. Peter y Jane se sienten como el desafío y tan friolentos como el aire o el viento que pasa en su piel demostrando que se puede amar a pesar de ese friolero momento. Peter y Jane los dos enamorados se enfrascan en el tiempo y más en el ocaso casi inerte de un sol majestuoso en dar una sola fría atracción de ver y observar a dos enamorados como lo son Peter y Jane.
Peter y Jane se enamoran más y hacen el amor a la orilla de la playa en el continente africano. El mar bravío e impetuoso con un sol resplandeciente transcurre la tarde y la osadía de amar bajo ese candente sol en una tarde de verano cuando Peter y Jane se enamoran cada día más y más. El calor acuestas en su propia piel hace extremadamente el sudor extraño en la piel y así volcándose en la arena se aman una vez más a orillas de la playa en el continente africano. La pareja lleva exactamente tres semanas de luna de miel deseando volver a amar y entregar el alma y el corazón destruyendo todo lo que sea mal para poder ser en verdad feliz. La vida de Peter y Jane comienza a enfrascar una sola idea en el corazón y es que el amor los hace pecadores del propio amor. La tentación del amor entre Peter y Jane se desvanece en el alma cuando sólo se aman conjuntamente con una vida unida y en santo matrimonio. La vida para Peter y Jane se aferra en saber que el amor es como la gran buena suerte en obtener el corazón. Peter y Jane se aman torridamente a la orilla de la playa en el continente africano, es un amor como ningún otro amor cuando se encontraron en aquella discoteca donde comenzó todo. Hoy día y ya casados en santo matrimonio se aman a la orilla del mar con el sol a cuestas sobre la piel y amando como nunca se reencuentra el amor, el corazón y la vida en un momento inocuo, pero, muy trascendental cuando Peter y Jane se aman sin dejar la sombra como huella intacta de un amor como el de ellos nada más. La vida para Peter y Jane se entrelaza, se cruza y camina un camino intransigente llevando a cabo un amor como ninguno otro. La vida para Peter y Jane es un amor con corazón abierto, con corazón destrozado, con corazón desvanecido si es un corazón tan enamorado como nunca ninguno otro igual. El amor entre Peter y Jane se aferra a la única idea de ver el cielo con un sol resplandeciente sin saber ni sospechar que llegará la tempestad o la tormenta con nubes grises al mismo cielo que los cobija a ambos. La pareja de Peter y Jane se enamoran cada día más de su propio amor en el corazón buscando enaltecer, privar, constatar que ese amor será duradero, majestuoso y trascendental. La vida de Peter y Jane se enfrenta a un combate de entregar razón y corazón en la vida y en el alma. La esencia de la vida para Peter y Jane se enfrasca en un torrencial y tórrido amor en que la vehemencia carnal se desviste para poder amar y entregar caricias gratas en señal del amor en que vive la pareja hoy día. El tórrido calor y la vehemencia carnal son el punto de partida para poder amar, entregar corazón, vida y alma sucumbiendo y zozobrando en esa orilla del mar en el continente africano. La vida de Peter y Jane, exactamente durante esas tres semanas de luna de miel en el continente africano, se ve venir el amor, la vida y más el solo corazón amando una vez más. Si afortunadamente se encierra el temor de amar bajo la sombra del amor, bajo la huella intacta de un amor como ninguno y si se aferra el corazón a amar nunca dejará de existir el amor como el puro amor de Peter y Jane. La vida para Peter y Jane se atrapa en una sola telaraña como poder vivir tranquilamente un amor como ningún otro igual. Peter y Jane hacen el amor a orillas del mar en la playa en el continente africano dejando el sol penetrar hasta el fondo de una piel que afortunadamente ama con un amor solventado, sin fuerzas, sin penurias, sin fracasos sólo deseando ver el cielo lleno de un sol clandestino, sosegado, majestuoso y resplandeciente fecundando el puro amor que existe entre ellos como la fuerza en querer ser el amor en esa orilla del mar y en esa playa en el continente africano.
Peter y Jane, después de transcurrir prácticamente un mes de luna de miel en el continente africano, realizan sus maletas y arriban a los Estados Unidos de América a hacer una vida normal. El festín y el banquete de la ceremonia quedó en recuerdos automatizando la espera en querer regresar a su origen natal para poder realizar su vida normal. Los tambores, las maracas y la mbira quedó en el tiempo y más entre los oídos un sonido sin igual buscando alterar nuevamente sus sentidos. La vida de Peter y Jane se aferra atando su vida, su corazón y más la fuerza por amar cuando llegan a territorio estadounidense, su lugar de origen natal para poder trabajar y ser feliz como pareja. La vida de Peter y Jane junto a amigos celebran el segundo matrimonio o enlace nupcial en territorio americano deseando ser felices y convertir su vida en prosperidad. La vida de Peter y Jane se enternece de fríos tenues y de calores tórridos cuando con junto amigos celebran el vehemente enlace matrimonial demostrando que el amor, la paz, la vida y el corazón se unen en señal de petrificar el amor con cada razón y con cada latir del corazón. Peter y Jane llegan a territorio americano abasteciendo su corazón y su amor entrelazando la vida, el corazón y la emoción de ser una pareja como ninguna amando sin peros ni consecuencias. La vida de Peter y Jane no calma en deseos vivos que su mundo se aferra a un insistente coraje de amar a expensas del odio, de la amargura o de las penas que otro cualquiera pudiera sentir. Ellos se aman y aman a todo mundo. La vida perpetra lo que encrudece de tiempo y espacio cuando el amor en el corazón tiene un temor sin ser amado constantemente y abatido como el tormento de sentir la pena en el mismo corazón. Peter y Jane demuestran que el amor es impetuoso, clandestino y muy templado, que el amor es zozobra cuando el alma y el corazón están intranquilos amando como nunca antes. Peter y Jane con su único amor sobre el corazón llegan a arribar a suelo americano buscando establecer, permanecer y perpetuar una vida en común y normal. La segunda celebración de la boda de Peter y Jane demuestra que el amor es mágico e intrascendente y que la fuerza por amar queda en un sitio de pormenor cuando es tan grande el solo amor en el corazón que pesa en el tiempo y más en el coraje del corazón. Peter y Jane se aferran como se aterra el corazón sin poder amar y ambos sólo desean amar y amarse en bien y en mal. La vida de Peter y Jane arribando en suelo americano, sólo, desean trabajar para poder convivir, vivir y amar libremente como cualquier pareja en la vida. Peter y Jane se aferran a la osadía de ver el cielo lleno de un sol como aquel sol en el continente africano demostrando que se puede amar en un sentido superficial, pero, real en el alma, en el corazón y en la vida. La vida para Peter y Jane se aterra en saber que el tiempo y más la osadía de sentir el corazón amando se encrudece el tiempo y más la vida en acechar la vida y el tiempo en un sólo fracaso y eso es lo que evitan Peter y Jane. Peter y Jane se aterra en saber que su mundo cambiará y que no serán dos sino tres cuando aquella vez bajo el sol impetuoso en la orilla del mar de la playa en el continente africano se fecundó la vida, el amor, el corazón y más que eso una nueva vida y un nuevo ser. La vida para Peter y Jane se enfrasca en que ya serán tres personas en un hogar lleno de amor, corazón y compasión demostrando que el amor y la alegría es todo. La vida atemoriza con demostrar que la vida fecunda un nuevo ser y una nueva vida para poder ser amados y entrelazados unos a otros y sí que pudo ser así. La vida de Peter y Jane se aferra a la alegría en ser padres de una criatura y así es la pareja que hoy día van a ser padres.
Peter y Jane serán padres. La vida se aferra a que la criatura ha de cambiar la vida, el amor, y el corazón de ambos con un nuevo corazón. La vida para Peter y Jane están muy felices de esperar a su retoño, el cual, lo han hecho con tanto amor y con tanta pasión y con tanta vehemencia carnal y amando como nunca antes. Peter y Jane serán padres cuando el vientre de Jane crece aún más y más por la gestación de una criatura. Peter y Jane se ven en la encrucijada en la espera inesperada de esperar por la llegada de su primogénito. La vida para Peter y Jane se ven en la eterna encrucijada de la espera y de la llegada de una criatura que se está gestando en el vientre de Jane. ¿Será niña o niño? Ellos no desean revelar el sexo del bebé hasta que nazca. La esencia de Jane se ve venir en el trance perfecto de dar una solicitud casi perfecta en poder creer que su rumbo no perece jamás. La esencia de Jane se ve aferrada a la idea más efervescente de todos los pormenores cuando en el trance directo de amar a esa criatura se siente como la única verdad que será un niño o niña y muy amado con el corazón de ambos padres. La única verdad es que Peter y Jane serán padres de una criatura que llevará por nombre de guerrero, de valiente y de tener gallardía en el solo corazón. Peter y Jane se aferran a la idea de ver la carita de ese hijo que les ha de cambiar la vida, la forma y manera de ver la vida. Peter y Jane arreglan la habitación, la cual, está predestinada para cumplir los sueños enteros de Jane y de Peter también en lograr ser unos buenos padres con esa criatura. Mientras que la criatura se va gestando en el vientre de Jane, ellos dos, preparan la habitación y la ropa con que vestirán a esa criatura al llegar al mundo y por Jane dar a luz a una criatura producto del amor entre ambos. Peter y Jane se aman como nunca, pero, prefieren esperar a los nueve meses y poder parir la criatura para poder tener sus relaciones normales como ellos se aman a cuestas y bajo el sol en la playa donde les gusta más ver a todo el mar bravío, impetuoso e intranquilo. Peter y Jane se ven en la encrucijada de tener ya a esa criatura entre sus manos y entre sus quereres. Peter y Jane se sienten con la única verdad que la fuerza en la espera de ese retoño será la única felicidad inocua e inerte. Si transcurren los nueve meses de ese retoño en gestación y Peter y Jane se sienten como una feliz pareja en la sola espera de la llegada de ese único hijo. Peter y Jane se aferran a la idea única, mágica y trascendental de querer ver la carita de ese hijo que pronto está por llegar al mundo dando a luz una mujer llena de ilusiones gratas por amar a Peter. La vida para Peter y Jane se aferran a la idea de que ese hijo les ha de cambiar la vida y más que eso la forma de amar, porque será un amor tanto maternal y paternal cuando se encrudece la espera inesperada en dar una sola solución en amar lo que nunca a una criatura que ha llegado por el amor y por la ilusión de un sólo hijo que pronto dará luz Jane. Peter y Jane va a dar a luz pronto, cuando la sola verdad es que amaran a ése hijo como único amor, como único primogénito y como único desenlace de querer ver esa carita por haber llegado al mundo. El hijo de Peter y Jane pronto ha de nacer, mientras que el amor de Peter y Jane se aferran a la sola idea en querer ver y mirar a esa carita después de nacer ese primogénito. Tanto Peter y Jane se aferran a la vida perfecta en querer tener ya entre sus manos más cálidas de creer en el alma y más en el corazón de amar lo que nunca en el solo corazón a esa nueva criatura que les dirá papá y mamá algún día nuevo de sus días. Peter y Jane se aferraron a la gran idea de tener entre sus quereres a esa criatura que pronto ha de nacer al mundo y todo porque lo aman desde antes de nacer.
Peter y Jane transcurren más de nueve meses contentos y felices en la espera de su primogénito. Peter y Jane se transforman en un hombre y en una mujer y amante del amor y de la pasión y del amor hacia su único primogénito siendo un amor como nunca antes sentido. Los nueve meses de gestación de Jane fueron buenos, y como una primeriza madre ella llevó las recomendaciones al pie de la letra todo el embarazo. A los nueve meses de gestación la felicidad creció más y más cuando Jane y Peter esperan la llegada al mundo de su primogénito. Jane prepara todo para la llegada de su primer hijo, es como una sorpresa en caja de pandora, es una linda admiración en caja de pandora, porque en realidad que el vientre es como una caja de pandora lo que te salga ahí es lo que te toca tener y lo tienes que amar por el resto de tu vida. ¡Ay, de la caja de pandora de Jane!, si tiene ya nueve meses de gestación y está a punto de parir, cuando a esa criatura la fecundó en la orilla del mar de la playa en el continente africano cuando hizo el amor con Peter. Para Peter y Jane transcurren nueve meses de gestación cuando apenas siente que esa criatura desea y quiere llegar al mundo. Cuando transcurren los nueve meses de gestación de Jane, Peter arregla la habitación del niño o niña con colores pasteles sin identificar color alguno por sexo alguno. La vida de Peter y Jane se siente como se aferra a la gran idea de convertir la vida y la razón en un sólo corazón y amando como nunca antes en aquella orilla del mar en la playa en el continente africano. Han transcurrido los nueve meses de gestación de Jane mientras que ella pasa desapercibido todo lo sucedido en el continente africano sin poder olvidar aquellos buenos momentos de una boda en celebración cuando logró casarse con Peter. La vida para Peter y Jane se aferró al buen desenlace en poder parir a esa criatura que fue fecundada desde el continente africano. La vida de Peter y Jane se aferró a la idea marcada de entrever que el silencio automatizó la única espera inesperada en traer a esa criaturita al mundo dando a luz. Si han transcurrido más de nueve meses de gestación para Jane cuando en el afán irrumpe en un ir y venir lejos de la realidad cuando se aferra a ser como la nueva criatura que está por llegar al mundo. ¡Ay, de la caja de pandora en el vientre de Jane!, y la caja de pandora no eran males o dones preciosos como la mitología sino que su vientre es como la caja de pandora abriendo al mundo una sola criatura y es el primogénito de Peter y Jane. Peter y Jane se aferraron a la idea más conveniente de creer que esa criatura ya está por venir al mundo y que pronto Peter y Jane serán los padres más felices del mundo entero. Jane pronto será madre y Peter será el padre más orgulloso de todos los tiempos, cuando su hijo llegue al mundo si Jane puede parir bien sin contraposiciones a esa criatura que está pronto por alumbrar al mundo. La vida de Peter y Jane se aferran a la idea en poder convertir a su razón de ser como un sólo buen momento cuando Jane casi está por alumbrar a esa criatura. Los nueve meses de gestación de Jane transcurren excelentemente bien y sin dolor alguno ni complicaciones en malos hábitos durante el embarazo. Si Peter y Jane se aferran a la única idea de ver al cielo como el sol mismo creyendo que esa criatura va a ser como el mismo sol de rubio como lo son ellos americanos. Jane está a punto de parir esa criatura y ella y Peter están muy contentos de ver llegar al mundo y tan inmundo a una criatura fecundada a la orilla del mar en la playa en el continente africano. Peter y Jane se encuentran como los padres más primerizos de todos los buenos y malos tiempos. Cuando Peter y Jane se ven aferrados a traer al mundo a esa criatura que los llenará de eterna felicidad.
Jane está a punto de parir y es una osadía llevar a la mujer al hospital. Jane está a punto de parir a esa criatura que querrá con toda su vida después del festín tan inmenso que celebraron en el continente africano por una boda y un enlace nupcial donde se dio el, sí, acepto. Jane aún recuerda todos los pormenores de la linda celebración en el continente africano. Y, sí, para Jane fue una velada muy dulce y muy mágica y esplendorosa de atraer el amor en el alma y más en el corazón. Y más cuando se amó verdaderamente en la orilla del mar en la playa en el continente africano donde se fecundó el alma y más el corazón de una mujer amada y muy querida por su actual esposo Peter. Si Jane da a luz a esa criatura que tiene en su vientre y más será la gran felicidad para la pareja de Peter y Jane. Para llevar a Jane al hospital fue un trauma, una pesadez y un gran triunfo cuando con todo vientre inflado por la gestación no pudo contener las fuerzas que realizó para poder montarse al automóvil para poder ir al hospital como una gran osadía de ver a esa carita salir de su vientre y poder ser más feliz. La única diferencia de creer que el momento hiere como espada o como soldadura de una reja en que sólo el tiempo transcurrió es como querer ver a esa carita al nacer. La vida para Peter y Jane se aferra en la gran y única felicidad en querer sostener en el alma y más en un sólo corazón, una sola verdad y es que pronto nacerá el hijo de Peter y Jane. Para Peter fue una gran osadía cargar y llevar en sus brazos a ésa mujer con ese gran e inmenso vientre, con el cual, lleva la vida de esa criatura que está a punto de nacer en el hospital más cercano de la residencia en suelo americano. Peter se siente como un hombre decidido en poder ayudar realmente a su mujer llamada Jane, cuando la lleva urgentemente al hospital cuando rompió la fuente en la habitación de la residencia ubicada ya en suelo americano. Peter casi carga a ésa mujer con toda fuerza de hombre feliz que por nacer esa criatura se ve en la encrucijada parca en querer ver y sentir entre sus brazos el calor de esa criatura indefensa que está a punto de nacer. La vida para Peter y Jane renace en la nueva felicidad de creer que el mundo es tan inmundo les trae una gran felicidad y es esa criatura que está a punto de nacer. Porque cuando está a punto de nacer esa criatura desde la caja de pandora del vientre de Jane viene con dones o males es un niño bueno, bonito y muy saludable, si Jane se cuidó extremadamente durante los nueve meses de embarazo. Los nueve meses de gestación de Jane fueron muy convenientes y muy saludables cuando se cuidó con demasía e irremediable salud cuidando a su vientre de todo los males. ¡Ay, la caja de pandora del vientre de Jane!, no trae males ni dones sino a un niño muy bonito y muy saludable. Peter y Jane se enfrascan en un tormento fastuoso, opulento, con mucha suntuosidad cuando está a punto de nacer su hijo. La vida para Peter y Jane delibera, expele, exhala y se siente mucha felicidad porque el hijo de ambos está pronto a asomar su carita por la caja de pandora del vientre de Jane. ¡Ay, la caja de pandora del vientre de Jane!, no trae males ni dones preciosos sino un niño bonito, grande en peso y estatura, hermoso y saludable. La vida irrumpe en una eterna felicidad cuando enternece la escena por nacer ése hijo añorado, deseado e ilusionado de la pareja de Peter y Jane y, pronto se le verá la carita por alumbrar al mundo después de haber sido fecundado en la orilla del mar en la playa del continente africano. La vida para Peter y Jane, ¿cambiará para bien o mal o quedarán igual de felices como siempre? Peter y Jane llegan al hospital cuando Peter hace demasiada fuerza por ayudar a levantarse de la silla de ruedas a Jane para poder ir a sala de parto y poder parir a su primogénito.
Jane puede parir la criatura, pero, en vez de salir del color blanco sale del color negro. La criatura arriba y alumbra Jane en el hospital más cercano y ubicado cerca de su residencia. Jane por parir a la criatura hace una fuerza extremista en su vientre y sólo recuerda ese día a la orilla del mar en la playa en el continente africano cuando nació su primogénito. El recuerdo ambigüo, pero, no ambivalente de Jane en su memoria se encrudece de tiempo y de sosiego constante cuando en el alma y más en el corazón no se detiene el vil, y el desastroso, pero, buen recuerdo de la celebración de su matrimonio por allá en el continente africano. Peter y Jane se hallan en sala de parto y Jane pariendo a su primogénito y Peter grabando todo con una felicidad inconsecuente en poder recibir casi en sus brazos a ese hijo deseando y tan añorado de la vida misma. La caja de pandora del vientre de Jane, no trajo males ni dones preciosos, sino un bebé del color negro. Peter quedó estupefacto cuando graba la situación del parto en la sala de parto. Peter no puede creer la terrible situación que le perece al nacer su primogénito de dos americanos del calor blanco y con sus cabellos rubios en suelo americano. La vida acontece, hace récord, hace un virazón, o una manera de castigar. No hay ni existe explicación para tal evento cuando Jane lo mira se desmaya en quirófano y en sala de parto, porque lo que parió fue un niño negrito, y bien negrito. Peter logró captar el feliz momento y le dice a su esposa Jane que… -¨es un bebé negrito, mi amor…¨-, y el doctor que la atendió le brinda a su hijo primogénito para que su madre lo conociera y Jane se desmaya por ver y conocer a ese niño negrito que salió de la caja de panadora del vientre de Jane. Y no fueron males o dones preciosos sino que ha nacido un niño negrito, y negrito como la noche más oscura. Jane lo mira y lo observa detenidamente y les dice a las enfermeras que… -¨ése fue lo que alumbré..¨-, y la enfermera y el doctor asintió con la cabeza y Jane quiso y amó a ése negrito como si hubiera sido su porpio corazón. La vida para Peter y Jane ha cambiado drásticamente porque ellos como son de cabellos rubios creían que su hijo primogénito saldría igual que el sol, pero, aunque no fue así ellos aceptan su realidad y lo aman y lo quieren como su verdadero hijo que es. La vida de Peter y Jane enfrascó una sola idea de creer que su esencia, su virtud, su pureza está en juego. Aunque, Peter dudó un momento de su infidelidad como mujer, pero, sólo, recuerda la celebración de la boda en un país africano donde el festín en confín se realizó con gente de color y que con tambores, maracas y mbira se dio el más grato de todos los momentos cuando se amó, se bailó y se entregó alma, cuerpo y vida en una entrega amorosa dejando saber que el amor lo es todo en el corazón. Tanto, Peter como Jane aceptan a ése hijo de color negrito entre su linaje y su familia siendo el primogénito de la pareja. La vida de Peter y Jane cambió drásticamente, pero, el momento, la vida, el corazón se entrelazan para dar rienda suelta a un amor como lo fue haber parido a un hijo de color negrito y que salió de la caja de pandora del vientre de Jane. La caja de pandora no trajo males ni dones preciosos sino a un bebé negrito y se amó con todo el amor del mundo. La vida de Peter y Jane quedan asombrados, estupefactos y atónitos con la única sorpresa del destino fue que Jane parió a su hijo primogénito del color como la noche oscura y que perdurará para siempre porque lo que llega de la caja de pandora es la sorpresa del destino y tienes que aceptar por el resto de tu vida. Jane y su criatura se conectan de corazón a corazón amando como nunca antes a ésa criatura que acaba de nacer por el resto de su vida.
¡Ay, de la caja de pandora del vientre de Jane!, cuando tuvo la pareja un hijo de color negrito como la noche oscura. La caja de pandora en el vientre de Jane quiso sucumbir en un tiempo nefasto, impetuoso, trascendental, pero, muy consecuente al vivir ese momento cuando Jane parió a ése hijo de color negrito dejando a un amor en el corazón por el resto de su vida por amar a su propio hijo y así fue que le entregó alma, vida y corazón a ése hijo de color negrito. Tanto Peter como Jane aceptan lo que trajo y abrió la caja de pandora esperando a amar como todo ser humano a sus propios hijos. La vida de Peter y Jane se enfrasca en un tormento frío, en un desastre automatizado, pero, una felicidad que les llegó por abrir a la caja de pandora del vientre de Jane. Tanto, Peter como Jane aceptan los designios de Dios y recordando la vida en la celebración de la boda de ambos en el continente africano donde fueron eternamente felices con tanta gente de color recordando siempre aquella orilla del mar en la playa en el continente africano cuando se facundó la vida, el corazón y más un hijo entre las entrañas de una mujer del color blanco como lo es Jane. Tanto, para Peter y Jane la vida cambió impetuosamente a amar a ése hijo de color negrito que Dios le dio como preámbulo de otros hijos que vienen por venir. La vida para Peter y Jane se enfrasca en una osadía de amar a ése hijo negrito. Tanto, Peter y Jane deciden vacacionar en algún lugar del mundo después de exactamente de dos lustros de existencia de su hijo de color negrito y lo que le resta es regresar al continente africano y sí que aceptan enseguida, hacen maletas y se marchan hacia el continente africano en busca de sabor, soneo, sandunga, tambores y maracas y mbira para marcar pasos al danzar y ser feliz con la cultura africana. Y, exactamente después de dos lustros de existencia de ése hijo de color negrito la pareja se ha marchado nuevamente al continente africano esperando la misma buena suerte de haber tenido a ése hijo de color negrito. ¡Ay, de la caja de pandora del vientre de Jane! porque las maracas, los tambores y la mbira suenan desde el más recóndito secreto en el vientre más ilusionado y es la caja de pandora que no trajo males ni dones preciosos sino a un negrito sandunguero, tal vez, del continente africano.
FIN
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Autor:
EMYZAG (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 5 de abril de 2025 a las 00:03
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 9
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
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