Han pasado días
que ya no sé contar.
Y sigo mirando el buzón,
aunque nadie lo use ya.
No hay cartas,
ni mensajes escondidos en el viento.
Solo el silencio
convirtiéndose en costumbre.
A veces creo escuchar tu voz
en la forma en que cae la tarde,
o en el crujir de un recuerdo
que se niega a morir.
Pero no es verdad.
Son mis ganas.
Reviso las memorias
como quien busca pistas.
Pero todo está igual:
tu ausencia intacta,
mi esperanza despierta.
No sé si alguna vez
me llegará tu noticia.
Solo sé que aún escribo
por si decides responder.
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Autor:
Wilma (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 6 de abril de 2025 a las 10:32
- Categoría: familia
- Lecturas: 21
- Usuarios favoritos de este poema: racsonando, EmilianoDR, pasaba, Raiza N. Jiménez E.
Offline)
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