Como salta el pequeño al avistar
tras la ventana al padre que se acerca,
así se alegra el justo porque intuye
la hora cuando ante el pasmo de los pueblos
habrá un puente entre el cielo y esta tierra.
Será el día admirado por los siglos
cuando descienda el Santo entre las nubes.
E igual en todo al niño
que nunca lo verás avergonzado
de mostrar su alegría ante un extraño,
también el escogido entre los hombres
ha de alabar saltando a la visión.
Débil le llamarán,
pero de súbito tendrá la fuerza
para agitar los brazos como el águila.
Verá hacia las alturas
con un salto valiente muy semejante al vuelo.
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Autor:
Enrique Fl. Chaidez (
Offline) - Publicado: 11 de abril de 2025 a las 00:09
- Categoría: Religioso
- Lecturas: 17
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez, Tommy Duque, Josué Gutiérrez Jaldin, El Hombre de la Rosa, Jaime Correa, JUSTO ALDÚ, Antonio Miguel Reyes, ElidethAbreu
Offline)
Comentarios3
El arte de tu bella pluma ilumina con su poder tus bellas estrofas estimado poeta y amigo Enrique
Recibe un fuerte abrazo de Críspulo desde Torrelavega
El Hombre de la Rosa
Gracias, querido amigo.
Un fuerte abrazo hasta Torrelavega.
Enrique.
Pero los que esperan en el señor renovarán sus fuerzas; levantarán las alas como águilas, correrán y no se cansarán; caminarán y no se fatigarán... AMEN! BENDICIONES!! Saludos, poeta
Gracias, Alicia. Grandes bendiciones para ti. Cordiales saludos.
Enrique, me excuso por no haber podido pasar por tus letras.
Al leerte veo tan cerca las ventanas de los cielos y espero se abran siempre en tu vida.
Abrazos y gracias.
Gracias, Elideth, por tus amables palabras. Me honras con tu lectura.
Abrazos cordiales.
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