Le enseñaron a hablar, pero no a expresarse,
le enseñaron a sumar, pero no a compartir.
Le dieron juguetes, le dieron excusas,
pero nunca el tiempo para existir.
Ahora camina con un vacío,
con un eco frío dentro del pecho.
Porque lo dejaron, aunque estuvieran,
porque lo olvidaron, aunque hubo un techo.
El abandono no es solo distancia,
también es silencio donde hay que abrazar.
Y un niño crece sin quererse,
cuando en su casa nunca hubo un lugar.
-
Autor:
Juan de Marco (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 15 de abril de 2025 a las 08:11
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 24
- Usuarios favoritos de este poema: Mauro Enrique Lopez Z., EmilianoDR, Mael Lorens
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.