Negruzco Sendero, Recuerdo Carmesí

Nik Corvus Corone Cornix

En un devenir sustrae
cierto maniquí terco y a tono,
conlleva azahares
en esquinas de sabiduría magnífica,
aniquila un sonido manchado
entre noches aún mas oscuras
que negros pozos
de metros quietos y dormidos..

Doblas la esquina,
retador incauto,
enervas esa negrura
restando importancia,
dejas de mirar al juego
de once contra once,
intrépidos corceles,
ya te sientes el más salvaje,
cuán idiota no sabes que eres,
ante la poderosa noche!

Sigues consejo
de una reina de verdades,
buscas amigo,
fiel y gallardo, nunca fallará.

Esperas un atisbo, un rescate,
no consciente, hechas a caminar,
por el sendero morboso y azabache
de la misma soledad.

Cuán duro crees que eres,
que ni tientas a estrellas
y crees fuertes tus corazas?

Cuánto creiste que podrías caminar
sin rumbo y perdido,
sin devenir en extrañar???

Comienza el torpe engreído,
por cuadras ya repasadas pero olvidadas,
a discernir entre el conocer
y los olvidares de un año
jocoso y derrocado..

Te sientes firme,
haces tres cuadras,
quince, veinte.

Cruzas esas avenidas,
y saltas esos rieles,
estúpido, el tonto que cree
que olvidó y está listo...

Repasas nombres y alturas,
San Martín, Segurola,
Julián Moro,
destino honroso,
no será encontrado
ni aunque recorras en pleno día.

Ni siquiera un viento,
el frío más colonial y paisano
acompaña tu andar sufrido,
y ni así supiste que era el frío
de fantasmas dormidos
en corazones aquietados..


Primer puente, lo divisas,
mitad de camino, afirmas,
ni siquiera sabes!

Te crees tan monstruo
en noches de vampiros,
aún no sabes de infiernos
en tu propia temple,
en saberte perdido,
solo por siempre....


Incontables autos dejas pasar,
te derrocas en bajar esa curva,
atenerte a cruzar vías tanto dejadas,
ni siquiera huellas hay
en el camino que tomas,
no analizas que estás en lo más oscuro,
y no precisamente por que no dé la luz,
sino porque nunca un alma había pasado
por ese camino congelado y maniático!

Comienza a poseerte,
ese miedo furioso, como mil toros,
te detienes tan sublime, idiota,
buscas enseguida a quien acudir,
bienvenido, te dice ella,
estás solo, por fín ante mí...

No corre ni una pizca de valor
sobre tus piernas, intentas cruzar
pero sofocas.

Reinicias la marcha.

Te crees capaz...

Haces otras curvas y otras rectas.
Otras veinte, ya ni nombras los nombres,
ya caminas embriagado en susto
y ahogado en no saber
ni la hora, ni los minutos...

Ya no observas casas,
ya enormes baldíos inocuos
te devuelven desesperanza,
ya sientes ese reflejo en el espejo
de tu corrupta, desolada alma.

En el páramo más negro e infértil
te observa una torre gris de pesadilla.
es tu muerte, idiota rastrero,
la que espera y maravilla
de tu tan pelotuda soledad...

Divisas segundo puente,
corre mínima esperanza, acompaña a tus pies.
Respiras aquietado, crees lograr de una vez.
Eres niño, no hombre.
Éste es tu fallecer.

Durmientes pesadillas
te corroen entre venas ya violetas,
y vendavales de espanto
ya sientes al elevarte maltrecho,
no alcanzas a gritar, oh estúpido,
ya das cuenta que además de estar perdido,
te sientes perdido, y no eres más que cadáver.

Lo inmenso del cruce, esta vez,
ni se compara con lo grande que creías
a tu panteón rojo y pulsante, corazón.
Un cruce estoico y desmedido
tan solo fuerzas a mirar,
y no das ni un paso.

Miras esas nuevas vías de tren, esta vez,
interminables, ya no oscuras,
completa y divertidamente negras.

Recuerdas lo bella que era la completa soledad.


Pero esta vez te lanzas en llantos.

Y sabes que ese alambrado
interminable y sin pasadizo,
ese obstáculo indomable,
es en realidad el paso natural
que no puedes dar, pues sostienes aún
un despecho, y recién ahora disciernes.

Vuelves, asustado,
y saboreas ese peso completo
en gargantas, esa angustia desmedida.

Vuelves.

Haces el camino devuelta,
esta vez no es negro,
es completo rojo, es recuerdo,
es amor y es compañía,
es duchas y es risas,
es placeres y bienvenidas.

Es no tenerla, ya no es mía...

Ahora comprendes el sufrir.

  • Autor: Nik Corvus Corone Cornix (Offline Offline)
  • Publicado: 14 de noviembre de 2010 a las 04:38
  • Categoría: Triste
  • Lecturas: 55
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