Me acostumbré a tu presencia
Como las piedras al roce del río
Como las flores al abrazo del sol matinal
O las alas de la mariposa a la suave caricia del viento.
Sabe acaso la piedra de dolores y sombras?
Sabrá el sol del acoso persistente de las nubes sobre nuestro espíritu?
O la mariposa de la cómplice ignorancia del aire?
De tu ausencia nace un cauce seco y alas vacías de sostén
Y la penumbra se anticipa al día que no termina
Cubriendo su semblante con pesado velo
Que solo tu recuerdo logra contener.
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Autor:
JOK (
Offline)
- Publicado: 23 de abril de 2025 a las 00:42
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 0
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