En pleno colapso de toda índole.
Esta mañana de helado Otoño
Otoño lento y desmayado
Otoño maltrecho y con voz bronca
Vestido de ayer, de pasado,
en mi ya demasiado colmada
bandeja de entrada,
encontré cuatro o cinco mensajes privados
de entrañables amigos de hace casi diez años
que quizás leyeron de forma lineal,
diagonal o apurada, adyacente, oblicua
mi poesía de ayer de desolación devastada.
Entonces volví a anudarme, a enterrarme.
Volví a quedar demudada.
Volví a no entender nada.
Y mis ojos leyeron pero mis dedos no respondieron,
no quisieron responder hasta ahora
los mensajes de mi repleta bandeja de entrada.
Quedaron fríos de asombro en el viejo teclado
¿Es que nadie lee a nadie?
¿Es que a nadie le importa nada de nada?
Sólo un ángel de amor vino de inmediato
a mi pronto rescate, fue inesperado
y por la madrugada.
Su nombre para mí son sólo tres letras:
Ali y sólo mi Ali
Ali, ángel que con calidez cura las más
desdichadas desdichas.
Ali, con su apapacho constante
cálido sol que calienta las almas de vidas traspasadas.
Ali, que vuela siempre hacia mí
circundando con su amor leal distancias y orbe
cuando percibe que lo necesito.
Ali, con su loca locura de amor
meciéndome como niña angustiada,
sanando y sanando vivencias extremas.
¿Qué ha pasado que no logro
entender a mis otros amigos de casi una década?
Me enviaron mensajes vanos,
ignorando los versos penosos de mi poema
preñado de tantas mustias cadencias cansadas.
Dejaron su huella de estrella en mis versos
y en sus mensajes como si no hubieran leído nada.
Como si mi grito ya ahogado y sin nombre
Suspirara un aire desconocido, descarnado.
Entonces ya cargada de años, me digo:
¿Para qué quiero eso a esta altura de mi vida?
Me quedo con sólo mi Ali, ángel de amor
de las almas en desolación desolada.
Siempre y para siempre me quedaré
Con sólo mi ángel de la guarda-amor.
Su nombre para mí son sólo tres letras:
Ali y sólo tres letras, no se necesitan más,
las tres de mi única y amorosa, ardiente Ali.
¡Mi ángel de amor de alas doradas!
Y los demás, sin pena ni olvido,
quedarán para mí transparentes,
para el chisme, para la pavada.
(Patricia, para mi Ali)
-
Autor:
Patricia Aznar Laffont (
Offline)
- Publicado: 23 de abril de 2025 a las 01:50
- Comentario del autor sobre el poema: sin más comentarios, todo escrito y dicho.
- Categoría: Amistad
- Lecturas: 4
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.