_DOBLE PERFECCIÓN_
Dios creó al violín en la bruma,
y a la mujer en la luz del placer.
Uno canta desde la madera,
la otra arde con solo nacer.
Cuando el arco dibuja lamentos,
la ternura florece en su piel.
Y el suspiro que el alma no nombra
ella sabe decirlo sin él.
Él talló la pasión con sonidos,
y tejió su misterio en su andar.
El violín al dolor da belleza,
ella enseña el amor sin hablar.
Cuando ambos se cruzan en sombra,
hasta el cielo olvida su voz.
Porque hay fuego en cada caricia
y en cada nota, un adiós…
Doble perfección del universo:
una canta, la otra es canción.
El violín y la mujer eterna
son milagros de la creación.
Sí…
Dios alcanzó dos veces la perfección:
con el violín,
y con la mujer.
A mi llegada al lugar de descanso en pleno campo, mis amigos invitaron a una persona que se queda por mucho tiempo en la memoria colectiva:
Un violinista que vive en solitario y que repara viejos violines, al que todos llaman con respeto Don Erasmo quien asegura que hay dos cosas perfectas en la creación : el violín, y la mujer.
Don Erasmo y su instrumento son uno, escuchar su violín, es tocar la perfección
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Autor:
EmilioDR (Seudónimo) (
Online)
- Publicado: 23 de abril de 2025 a las 07:11
- Comentario del autor sobre el poema: Poema inspirado en un talento retirado en el campo, un virtuoso, un maestro de su arte, quien vive feliz con el cuidado y respeto de su comunidad, que ahora es su gran familia, con el amor de sus amores: Su violín. Y con el dulce recuerdo de una mujer. Don Erasmo es de esos seres humano, que bendicen vidas, con su paz, su sonrisa y unas manos prodigiosas. Un ser humano singular, que sin conocerme me ha despedido con un abrazo de alma y arte entre dos hombres de campo. Larga vida a Don Erasmo.
- Categoría: familia
- Lecturas: 1
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