Resultó difícil su convivencia, complicado para sus padres. A los tres años le diagnosticaron autismo. Su madre creía que era un niño independiente, que le gustaba estar solo y poner unos cubos uno al lado del otro y volvía a hacerlo repetitivamente. Su hermana, siendo psicóloga detectó que el niño tenía ciertas particularidades y le sugirió que fuera a una psicóloga y determinará cuál era su diagnóstico. Llegaron a la conclusión de que Luis era autista. No fue fácil, los padres entraron a consultar distintos especialistas y tratarlo con varias disciplinas, porque les explicaron que al detectarlo tempranamente, lograrían mejores avances. Comenzaron con terapia, fonoaudiólogos, también personas que le enseñaran motricidad. Y de esa manera se iba a desarrollar mejor. Pero esto no quería decir nada, porque también podría tener retrocesos. Porque muchos avanzan y de un día al otro se olvidan, o dejan de seguir desarrollándose. Asimismo, le dijeron que en algunos casos podían llegar al punto cero, esto no era nada halagüeño, así mismo también le recomendaron que ellos como padres hicieran terapia de pareja. Porque si bien nadie nos enseña a cómo ser padres, es mucho más difícil cuando se tiene un niño autista. Se deben proyectar de otra forma. El padre se deprimió y por mucho tiempo no logró salir de esa depresión. Incluso siendo arquitecto, dejó el estudio que trabajaba con otros dos socios, por dos años .Fue ella la que siguió trabajando para mantener la casa, se privó de otras cosas, en pro de seguir con la crianza de Luis que era lo más importante en ese momento .Su padre se vio desbordado y devastado .. Ahora Luis tiene veintisiete años y se maneja bastante bien solo. Es independiente. Aunque sus temas pueden ser, como el camión de basura monta y desmonta el contenedor , otras veces habla sobre los programas de televisión de juegos. Recuerda siempre y te pregunta el día de tu cumpleaños .Si alguien deja de verlo por tiempo indeterminado, cuando vuelve esa persona a su vida le va a preguntar por todo nuevamente, aunque tenga todo grabado en su memoria. Recuerda el número, o el nombre de las calles con exactitud. Va tejiendo como un laberinto, porque está pendiente de que la calle cambie de sentido. Lo que más necesita es tener un orden, un horario. Específicamente tener programado el día a día. Cuando no resulta así, porque surge un imprevisto se pone mal y muchas veces logra comunicarlo pero la mayoría de las veces se incomoda, se enoja puede dar algunos gritos, movimientos, incontrolados, hablar y reír o directamente muchas veces pegar. No ha sido nada fácil la crianza de Luis, la madre cambió mucho su forma de ser. Era una mujer dócil, sumisa en cierta manera y cambió totalmente. Es una mujer con otra autoridad. Su hijo impuso que ella cambiara. La semana debe estar programada si algún compañero de la clase faltó, o se fue alguien y el maestro cambió, también eso puede ser signo de una rabieta. Porque necesita que exista un orden. El ha logrado evolucionar, pero fue trabajo de todos. De toda su familia y ahora el padre lo acepta mejor, siendo más grande pueden compartir otras cosas. Aunque siempre queda aquello de que él lo hace porque es caprichoso. Habría que ver, creo que la madre tiene otra paciencia con él, para explicarle y llegar a un entendimiento.Algunas veces su madre se ligó una patada, cosa que con el padre, él no se animó más, porque una sola vez trató de pegarle y el padre en ese momento reaccionó con más violencia que él. Entonces sabe que eso no lo puede hacer con él .Su madre al ver esas ganas de descargar su rabia, no fuera contra ella, le suministró una pelota grande de pilates para que le pegara.
(rosi12)
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Autor:
rosi12 (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 24 de abril de 2025 a las 14:31
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 12
- Usuarios favoritos de este poema: Poesía Herética, alicia perez hernandez, nachosol, pasaba, ElidethAbreu, Rosa Maria Reeder
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