Dios a Salomón dijo
apártate de los necios
que en la insensatez están fijos
y que de la ley hacen desprecio
a todo le ponen precio
y se ríen estrepitosamente
del humilde y prudente
que de Dios hizo aprecio
hablan desmesuradamente
sin medir sus palabras
y con falsedad solo labran
insidias constantemente
si en su caída se descalabran
orgullosos no se arrepienten
y con vileza y odio ladran
altaneros e indiferentes
es una perdida de tiempo
instruir a un ser malvado
no echéis lo santo a los puercos
en el evangelio es mencionado
el necio en su discurso
el saber lo utiliza
sin juicio y sin curso
y el disparate lo formaliza
Dios a todos nos ha criado
y por naturaleza nos unimos
cada cual por el camino
que sus obras ha marcado
el necio debe ser rechazado
con conciencia y buen sentido
evitando prestarle el oído
aunque tenga que ser escuchado
-
Autor:
Dj Shanti (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 19 de noviembre de 2010 a las 14:58
- Comentario del autor sobre el poema: Leyendo el libro de la Sabiduria de Salomon, asi como los evangelios, he resumido lo que aconseja, aunque haya que rechazarlos, nunca hay que odiarlos, ya que no somos nadie para juzgarlos,leyendo la ley de dios vemos que se condenan, a que como dijo Cristo, Dejarlos que ellos ya tienen su satisfación, pero vosotros no sigais su camino
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 569
- Usuarios favoritos de este poema: Kenny Lopez
Offline)
Comentarios2
Bien lo has plasmado amigo, no somos quienes para juzgar, la ley del Señor esta escrita y EL juzgara ........es un Dios de misericordia.
Un abrazo,
Gracias, atentamente shanti
Jose Luis
Mi abuela decia... "Nunca discutas con un estupido pues nunca estara a tu nivel... y si tu te bajas al suyo el te ganara por experiencia"
Tu poema me recordo esa frase de mi abuela Q.E.P.D.
GRACIAS por traerla a mi mente
Gracias a la bendita providencia, la sabiduria de los ancianos a los hay que tenerles respeto, me viene como añillo al dedo, gracias mil veces gracias, por lo que te decia tu abuela, que lo guardare en mi mente como un regalo del Señor, el cual tu me has dado.
Atentamente shanti
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