Amanecí con un deseo en mi corazón, que dirige mi errante camino.
Un delirio de exquisito gusto, que es dibujar un retrato tuyo.
Prepare una cartulina fijándola en el tablero, pensé en forjarla en óleo al pastel.
Trazando directo en ella tu rostro, sin concretar un trazo acorde con el.
Pase a la carbonilla como otra opción y tomando mucho cuidado al hacer.
Un trazo suave no marcando mucho, pero fue imposible hacerlo así.
Finalmente me dije como derrotado, la acuarela será mi último intento.
Pero lo único que pude realizar en que solo una mancha pude lograr.
Intente casi todas las opciones posibles en el arte de lograr una pintura.
Cuando me di cuenta que inútil fue el esfuerzo de una replica, teniendo en forma continua “EL ORIGINAL”.
Robi
- Autor: robi (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 3 de diciembre de 2010 a las 09:09
- Categoría: Amor
- Lecturas: 95
Comentarios1
Noooo, jajaja, sos un capo total Robi, vos también sabés que no hay nada como lo original, que nunca, ni el más perfecto artista logrará su cometido, teniendo el original tan...cerca. La carbonilla es difumina al menor roce de los dedos, y nunca será lo mismo.
Muy bueno, amigo surero, que ahora es sureño. Jajaja. Besos pero de atril original.
Gracias , SU, me alegro mucho leerte nuevamente por que vos sos como el Falcon, que lo atamos con alambre y sigue andando, pensa que no estas sola y hay una tribuna que te reclama, bss de aeropuerto.
Pero no Falcon verde, no?, jajaja.
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