Si tus ojos me vigilan, y
tu boca embriagada de luna me mira,
cambiaria el hambre del pan,
por el aroma a violeta que tu piel destila.
Princesa del crepúsculo devorado, y
del cenit calcinado en el fuego del estío.
Corre el velo de tus ojos,
para que la noche ilumine, y
el oxigeno de los alvéolos mortales,
renueve mi artera sangre consumida.
Princesa del crisol ardiendo,
en ti arde el gélido invierno.
De la raíz de tu pelo,
cae el alud del negro intenso y absoluto.
Hasta tus hombros tersos del consuelo.
Hombros forjados en madero de algarrobo,
cálida rama de alerce y copa en punta, donde
se despliega, la cordillera resumida por tus brazos,
Regurgitando lava al volcán de tus dedos en racimo.
¡ Dedos de uva y lava que dan sed ¡
¡ Carne y uña, que causan hambre ¡
- Autor: RICARDO ALVAREZ ( Offline)
- Publicado: 22 de diciembre de 2010 a las 22:47
- Categoría: Amor
- Lecturas: 54
Comentarios1
Dónde quedó la V de vendavales??
Cuanta hambre de letras me producen sus versos.
Qué forma de describir, descomunal !!!
Brava
Y bravo,
Muchas gracias grettell por tus comentarios. la vez anterior no te interprete cuando dijiste que puedo decir de este poema. saludos. ya voy a leer algo tuyo . Todavia no le tome la mano a esto. aca dice online y no se como usarlo. otra vez si pudieras comentamelo. nuevamente gracias.
QUé bueno que me dices eso, estoy segura de que a veces no me doy a entender, y aunque intente cambiarlo no se me quita. Ni hablar.
tus poemas me encantan, algunos hasta me dejan sin palabras.
Dime qué quieres que te comente, no entendí eso. On line, sólo indica que estamos conectados, por eso estamos platicando así... inmediatamente n_n
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