Lunas nuevas.
Cargadas de esperanzas
por el nuevo amanecer.
Lunas crecientes.
Que a la felicidad se aferran
para luego, dejarse caer.
Lunas menguantes.
Pequeñas, tristonas,
pero cuando llegue la hora…
sabrán ponerse en pié.
Sí, todos tenemos lunas,
el que más o el que menos.
Pero pocas veces se encuentran
grandes lunas como esta.
Tan pequeña, tan vivaz.
Brillante luna llena,
rebosas felicidad.
- Autor: Ester (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 8 de julio de 2009 a las 11:36
- Comentario del autor sobre el poema: Es una reflexión sobre la felicidad en la que la palabra luna podría ser cambiada facilmente por las almas de las personas.Espero que les halla gustado, comentenme si quieren. Saludos, Ester*.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 772
Comentarios5
Me encantó la comparación de las fases de la luna con la felicidad, con la vida en realidad, porque así es la vida, tiene esas fases, crecientes y menguantes, pero hay momentos de luna llena. Esos momentos hay que aprovecharlos, porque la vida está en toda su plenitud. Como la tuya, hoy, Ester. Me gustó mucho.
Un beso.
Sí, claro que me gustó, que más hemosa comparación que la luna con el alma?
Hay que aprovechar la luna llena para después, también disfrutar las otras faces.
La Luna fuente de inspiración para todo el que a ella se acerque, y tu sabes describir muy bien todas sus faces, tus analogías son muy acertadas, me encantó que en tu poema lo simple es bello, se percibe una absoluta ternura y esperanza de la felicidad, que aunque sabes que la luna mengua, tarde o temprano llenará.
Un abrazo y un saludo Ester.
Alfonsina G.
Me fascinó la fases de la Luna, cada una con una alegría diferente, claro que la pase que me gusta más es la Luna llena.
Saludos Ester.
Adrian
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