Cuando por fin la encontré,
No se dio cuenta de mi llegada,
Demasiado entretenida,
Jugaba con las estrellas.
Alargué mis dedos,
Toqué sus mejillas,
Puso en órbita las estrellas,
Y se acercó a mí,
Blandiendo sus grandes alas.
Me asomé a la ventana,
Vi que eran como las cuatro,
De la oscuridad,
Volví borracho a la mesa,
metí a Dios,
dentro una botella de ron.
Juntos la bebimos,
Nosotros mismos,
Nos hicimos dioses.
- Autor: Rey de Siyankán (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 21 de febrero de 2011 a las 02:58
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 51
Comentarios2
ME gusto eso de hacerse dioses.
buena!
NoK...
Gracias, es motivante tu comentario, seguiré escribiendo.
Pues bienvenido amigo un placer!!!
NoK...
GRACIAS!!!
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