Y siento que la luz se aleja de a poco de la mi quimera… todo gira tan deprisa. El suelo se desquebraja bajo mis pies y lento comienzo el descenso a lo que será una muerte segura; dicho de otra forma, la libertad me alumbrará el camino que he de seguir.
Viendo pasar tras de mi cada uno de los años, las risas con amigos de infantes, las lágrimas de amores perdidos, los gritos de una familia humillante. No, sólo quiero sentir el aire corriendo a través de mi pelo, como lo surca, lo divide, lo fulmina. Es absoluto lo que pasa, mis brazos se extienden en busca del elixir de la muerte. Tus ojos palpan la mirada del interior.
El miedo se ha quedado en el punto de partida con mis ilusiones y esperanzas. Y sigo cayendo salvaje y suave, no hay rumbo definido ni meta asegurada. Los sentidos se quedan piso tras piso de tan alto edificio. Las ventanas dibujan siluetas de colores.
El tiempo transcurre y el manto gris da la bienvenida a mi cuerpo rompiéndolo en pedazos, como alcancía que libera sus tesoros guardados en monedas, todo se desparrama sobre el pavimento. Una ultima mirada y sobre mí el firmamento estrellado. Y a las estrellas les entrego, mis últimos deseos… descansen en paz con mi nombre en su recuerdo.
- Autor: Zhely Alceda (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 26 de febrero de 2011 a las 03:47
- Categoría: Triste
- Lecturas: 34
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