Me gusta espiarte desde el rincón oscuro
en que imagino que nunca te fuiste,
desde el reflejo claro de tu cabello castaño,
desde las paredes llenas del ruido constante de ayeres,
amaneceres tuyos que, de alguna forma,
me pertenecen.
A veces tu silueta hace un intento
por levantarme la voz, mentir cada vez mejor
y destruir los trozos de destino
del que alguna vez hablamos.
Tú eres tan dueña de las nostalgias
que nadie más llegó a brindarme,
como yo soy dueño de ese modo de besar
que te dobló las piernas una noche de invierno junto al río.
Desde ayer ya no busco más hojas caídas
ni luces en el metro,
desde ayer los besos
son entre desconocidos.
Tu luna ya no es más mi luna
y otra vez vuelvo a escribir
la misma historia, Sofía,
en la que tengo que inventarte.
Carlos Alcaraz
11/02/11
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Autor:
Carlos Alcaraz (
Offline) - Publicado: 9 de marzo de 2011 a las 11:34
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 67
- Usuarios favoritos de este poema: Leonardo Arzate, Claire
Offline)
Comentarios3
Excelente, me encantó
Un abrazo
Cómo serán los metros en Francia?? Desde ayer, la luna camina... sí, camina..... o tamará el tren??
*_*
: )
Wow, C'est très bon!!!
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