Y sigo esperando de tarde, cuando el sol penuria y mengua mi alma...
Sigo esperando entre lágrimas rotas en la reminiscencia, la réplica en tus pupilas lejanas...
Sigo esperando por nada y todo, sigues siendo como la ola que me humedece y se escurre marchándose, inundándome de ti...
¡Te ansío en este círculo de hastío profundo! pero amo el dolor dulce que provoca tú presencia tan cerca, a mi lado, y no te tenga…
Que mi diminuto pelaje logre rozar tu piel y tengo prohibido tocarte…
Mi aliento se angustia y mis ojos se desploman, resuenan profundos al no encontrarte en mi presente que no es mío, sino ausente por no tenerte…
Es entonces cuando voy y vengo como tu ola que es tu alma que me agobia y amo… y me arrojan a este girar cuiasiestático y rígido… de mi subsistencia en círculos por tus ojos y tu sin notarlo…
Todos los derechos reservados ©Ander Carrero, 2009, prohibida la venta y reproducción de esta propiedad intelectual.
- Autor: Prometeo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 20 de julio de 2009 a las 01:00
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 52
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