Está llorando una España
Pensando que la otra muera.
Y se han quedaron las dos
Sin sosiego en la trinchera.
Las dos están tan cansadas
Que aletargadas se quedan.
Por las quimeras de siglos
Que se enfrentan las ideas.
Está triste el combatiente.
Porque no sabe de escuela.
Que pena tan grande tiene
Por no conocer las letras.
El parte que ha recibido,
Es crucial para la guerra
Nadie puede descifrarlo
En su zona de trincheras.
Todos son gente de ejido,
Analfabetos de escuelas.
El sudor de las angustias,
Entran con mohín bravío,
Apretando está sus puños,
Con el parte y con la letra.
Está junto a Valsequillo,
En el frente de la guerra.
Con furor y con despecho,
Lanza el papel a la tierra.
En ese instante preciso,
Que los fascistas esperan.
Un tiempo de arremeter
A la barbarie de escuela.
El combatiente y la tropa,
Pordioseros de la guerra,
Aguantan las embestidas,
Con valor y con decencia.
Los muertos y los heridos,
Mezclados entre la tierra.
Con el rojo de su sangre,
Empapando tierra negra.
El combatiente rabioso,
Dispara esencia de letras,
Con estruendo libertario,
Sin saber nada de escuela.
Un jirón flota en el aire,
De una tricolor bandera,
Teñida con mucha sangre,
De unos hijos de la tierra.
El rencor de dos Españas,
Es eterno por su esencia.
Y se mete entre las almas,
Como virus de epidemias.
La arribada de la sombra,
Sosiegan las bayonetas,
Que traspasan la barriga,
Antes de besar la yerba.
Amparan sus posiciones,
Con lo nada que le queda,
Haciendo aferrarse está
En los pedazos de tierra.
Destinos libres del astro,
Irradiarle en su ceguera,
Y averiguar el mensaje,
Para que gane la guerra.
Pero la sombra se calla,
La voz del papel se seca,
Y la mañana se anuncia,
Sin saber de lo que sea.
Al ser la media mañana,
Una bomba traicionera,
Le quita de los sudores,
Por no visitar escuelas.
Así murió el camarada,
Por no saber unas letras.
Qué pena tiene la tropa,
Que vaga por las escuelas.
La España de los obreros,
Que triste y sólo le dejas.
Porque se quedaron todos,
En camposantos de tierra.
El camarada se ha muerto,
Con él se fueron las letras.
Autor:
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
21 de marzo de 2011
- Autor: El Hombre de la Rosa (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 21 de marzo de 2011 a las 04:21
- Categoría: Sociopolítico
- Lecturas: 373
Comentarios2
Bellos verso para dibujar aquella España que aunque yo no conocí personalmente me han hablado mis mayores de ella. Hoy gracias a Dios no creo que haya muchos papeles que no se sepan leer. Un abrazo
Estimada Carmen Diez Torio:
Ahora casi todo el pueblo español sabe leer y escribir, pero pero al penetrar el fanatismo de las ideas en su sangre, piensan muy poco o casi nada en cultivarse y poder entender entre nosotros a las actuales clases sociales preparadas para no entenderse jamás.
El miliciano no supo leer un parte de guerra, pero ahora las personas cultas tampoco saben entenderse entre ellas.
Un saludo de amistad sincero
Mi gran amigo Críspulo que alegria, verte de nuevo, saber creo que no es solo un problema de España, mi gran amigo en todas partes ocurre exactamente lo mismo nadie escucha a nadie...
que lastima, no sabemos ser buenos hermanos...
abrazos de gitana-.
Mi preciosa Gitana.
Unos frases quiero darte
que te llenen de nobleza.
Porque los Gitanos tienen
la cara de encanto y luna.
Será porque tienen cosas
que brotan de su locura.
A mí no ne importa nada
teñir de prosa mis letras.
Siempre que sea Gitano
el verso de tu presencia.
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