"Sintiéndome grande me atreví a soñar/ y aunque ahora sin ti me siento pequeño,/ me está prohibido despertar/ si no te he visto en mi sueño".
Por alguna razón anoche, no podía dormirme,
Confieso que hasta extraño llegué a sentirme
Y tenía un insomnio del que Dios fue testigo.
No pude saber qué era, incluso aún no puedo,
Tal vez era sólo un repentino e íntimo miedo
De despertarme sin haber soñado aún contigo.
Tuve unas conversaciones con mi almohada,
Ella en realidad ya está muy acostumbrada
A que le hable de ti antes de caer rendido…
Le confesé y no me dio vergüenza confesar,
Que temía que en sueños me pudieras amar
O encontrarme frente a frente con tu olvido.
Ya el sueño amenazaba con vencerme
Y yo no lograba todavía convencerme
De que dormir era lo más indicado…
Hasta mi aparato de moderno diseño,
Con la música que oigo para el sueño,
Por precaución estaba bien apagado.
Finalmente me dormí… me dormí…
Y efectivamente en mis sueños te vi
Y me mirabas con mucha alegría…
Claramente puedo todavía recordar
Que estabas, por lo que vi en tu mirar,
Feliz… muy feliz de sentirte mía.
Y nos comimos muy ansiosos a besos,
En dulces viajes de idas sin regresos
Que nos apartaban de todo el mundo.
Con un amor total, real, absoluto…
Disfrutábamos mucho cada minuto
Y bendecíamos ambos cada segundo.
¿Por qué entonces el miedo a soñar?
Si aquélla era una escena espectacular
Que satisfacía todas nuestras ansias.
Y sueño al fin, con la fuerza del querer,
Podíamos como por magia hasta vencer
Las más remotas e imposibles distancias.
Entre tantos sueños, hubo uno muy triste,
En el que sin explicación alguna te fuiste
Y nunca más volví a saber nada de ti…
Fue ésa una pesadilla tan inesperada,
Que solamente mi confidente almohada
Llegó a saber en detalle lo que sentí.
Y lloré, me desperté entre el llanto,
Pues aún soñando te extrañaba tanto
Como si hace siglos me faltaras…
Fue una sensación muy desagradable
Y me resultaba del todo inaceptable
Que de repente, ya no me amaras.
Y hasta con mi almohada discutí,
Porque si en un sueño te perdí
Y en sueños fue que te amé…
En realidad yo nunca entendí,
No sé para qué rayos me dormí
…ni sé para qué desperté.
- Autor: EROS (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 22 de marzo de 2011 a las 00:07
- Comentario del autor sobre el poema: Ojalá pudiéramos controlar los sueños...
- Categoría: Surrealista
- Lecturas: 402
- Usuarios favoritos de este poema: FELINA, alicia perez hernandez
Comentarios5
Muy gráfico tu poema, una descripción onírica interesantísima, y es mejor esto de no manejar los sueños, aunque no todos sean de color de rosa, es nuestra vía de escape.
Pero, claro, cuando uno despierta en ese estado, lo que menos quisiera uno saber es lo antedicho, jajaja.
Besos ami
¿Con qué sueñas tú? No quiero preguntar con qué sueña Lucy porque me lo imagino jajajaja... Tú eres una poetisa onírica porque puedes estar en el sueño de cualquiera. Un besote.
Pfff! Y te despertaste mal por eso??
Yo soñé que me perseguía un dinosaurio, una momia y un increíble Hulk gigante que casi se comía a mi hermana!! (en serio!) jajajaajja xD
Un abrazo Álvaro! 🙂
Y angelitos para que guarden tus sueños ^^
Jajajajaja... no le faltes el respeto a los sueños de este humilde mortal, mira que luego me acomplejo y ni soñar voy a querer. Luego de ver tus sueños, te aconsejo que tengas cuidado con lo que comes en las noches. Besos preciosa.
Vuélvete a dormir para que cambien el curso de los acontecimientos, mira que yo tambien me dormí en el poema de hoy, pero con un feliz despertar, vuélvete a dormir amigo mio.
Recibe mis ronroneos.
Seguiré tu consejo cuando esto me vuelva a pasar mi gata hermosa, pero si el sueño no se acomoda y despierto mal, iré ante ti a hacer los reclamos correspondientes jajaja... Un beso.
HOLA AMIGO MUY BELLO POEMA . LOS SUEÑOS NOS LLEVAN MUY LEJOS SON MÁGICOS ES COMO ESTAR DESPIERTOS. JUEGAN CON NOSOTROS AL SENTIR COMO ESTÁN NUESTRAS ALMAS , UN ABRAZO
Hola Daniel, bienvenido a mis letras, desde hace días estaba por preguntarte algo. ¿Tú tienes en Venezuela algún familiar? Es que mi hija hizo un curso con una señora con tu mismo apellido y como no es un apellido muy común, pienso que podrían ser familia. ¿Qué me dices? Un abrazo.
“¿Por qué entonces el miedo a soñar?
Si aquélla era una escena espectacular
Que satisfacía todas nuestras ansias.
Y sueño al fin, con la fuerza del querer,
Podíamos como por magia hasta vencer
Las más remotas e imposibles distancias.”
Todos los versos están buenísimos, Poeta, solo me separo estos, que me han resultado a mi sentir mas familiares.
Muy bueno, me encantó leerte.
Diluz
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