A los 57 años de edad, víctima de una enfermedad terminal, falleció en la madrugada del viernes el escritor y periodista cubano Carlos Víctoria. El deceso, que se produjo en el Hospital Palmetto de Hialeah, fue confirmado por el director del diario “El Nuevo Herald” (donde Victoria era colaborador habitual), Humberto Castelló. “Carlitos fue un profesional entregado y responsable, un escritor con pasión y disciplina, un hombre sensible y un buen amigo”, expresó Castelló a través de un comunicado. De acuerdo a la última voluntad del fallecido, no se realizaron servicios fúnebres.
Victoria nació en la ciudad de Camagüey en 1950. A los 15 años fue ganador de un certamen de cuentos organizado por la revista “El caimán barbudo”, aunque seis años más tarde fue expulsado de la Universidad de La Habana por “diversionismo ideológico”, cuando cursaba la Licenciatura en Lengua y Literatura Inglesas. Sus problemas con el Estado cubano continuaron en 1978, cuando fue arrestado y le fueron confiscados todos sus manuscritos. En 1980, Victoria decidió abandonar Cuba y se marchó al exilio junto a su madre. Cuando se cumplieron 25 años de su partida de la isla, Victoria recordó “ese instante de dolor y alivio cuando uno dice adiós a una pasión que llegó a consumirte”.
En 1983 fue uno de los fundadores de la revista Mariel, donde fue descubierto por la traductora y ensayista Liliane Hasson, quien se transformaría en su traductora al francés y en una gran promotora de sus textos.
Admirador de Flaubert, Camus y Dostoievski, sus cuentos fueron recopilados en antologías y publicaciones literarias en los Estados Unidos, Francia y América Latina. En 1992, la Editorial Universal publicó su volumen de cuentos “Las sombras en la playa”. Un año más tarde, su novela “Puente en la oscuridad” recibió el Premio Letras de Oro de Miami y obtuvo la beca Cintas para creación literaria. “La travesía secreta” (1994), “La ruta del mago” (1997), “El resbaloso y otros cuentos” (1997) y “El salón del ciego” (2004) son otras de sus obras.
Desde 1989 era habitual colaborador y redactor del periódico “El Nuevo Herald”, donde sus compañeros lo homenajearon tras conocerse la triste noticia. “Si la literatura fue su obsesión creadora, el trabajo en la redacción por casi veinte años estructuró su vida y lo convirtió en uno de los pilares de este diario”, aseguró el director del medio.
Comentarios2
me gusto bueno
enseña mucho y ojala que
sigan asiendo mas deestos
=):)=):)
chao
Hola, ante todo mis mas sinseros pesames para la familia del escritor y periodista calos victoria, quisas como el muchos escritores cubanos no tengan la posivilidad de desarollarse en su profecion, pero quien lucha por una idea siempre logra triunfando en ella, Al igual que una semilla para brotar un arbol tiene que morir, asi deben ser sus ideas, que al el morir recobren las fuersas nesesarias para bolar al biento y renaser con las mas grandes fuersas, le deseo exito a cada obra de el y su mas grande legado para sus seguidores.... disc..my..ort..
ATENTAMENTE : ADISNEY REMEDIOS..
Debes estar registrad@ para poder comentar. Inicia sesión o Regístrate.