Cusco promueve el quechua desde una exposición

La ciudad peruana de Cusco es, por estas horas, escenario de una original propuesta literaria que tiene como fin defender e impulsar la escritura y lectura en quechua a través de traducciones de textos como el cuento popular «El zorro y la perdiz» y la obra «Los heraldos negros», de César Vallejo.

El evento, organizado en la plazoleta Espinar por el centro Guamán Poma de Ayala, la municipalidad provincial de Cusco, la galería Apacheta y el centro Bartolomé de las Casas, ha sido bautizado como «Runasimipas qelqakunmi» («El quechua también se escribe») y busca, a través de textos traducidos, investigaciones y artículos editados por intelectuales de Perú, cautivar a los cusqueños con el maravilloso idioma de sus ancestros.

La feria en la cual se pueden encontrar trabajos de autores como Luis Nieto Degregori, Iván Yauri, Enrique Rozas Paravicino, Víctor Angles y Karina Pacheco podrá ser visitada hasta el próximo sábado. En ese marco y bajo la consigna «Runasimita ñawinchaspa, kawsayniykita wiñarichy» (frase que, en español, significa «quien lee ahora, liderará mañana»), los impulsores de esta muestra llevarán a cabo un interesante programa que incluye desde mesas redondas y lanzamientos de libros escritos en quechua hasta proyecciones audiovisuales, campañas de promoción de la lengua y conciertos de música en quechua.

Aunque una gran cantidad de ciudades desarrollan por año algún encuentro literario, esta feria del libro consigue diferenciarse entre las convocatorias de su estilo porque realza la importancia del quechua, una lengua originaria de los Andes Centrales que se habla en Ecuador, Perú y Bolivia, entre otros países.

Por ese motivo, quienes tengan la oportunidad de acercarse hasta la plazoleta Espinar deberían aprovechar la ocasión para interiorizarse acerca de las características de este idioma que no suele disfrutarse por escrito debido a que los autores no poseen demasiado acceso al mundo editorial.