En un mundo donde abundan las noticias terribles, hay tragedias que calan especialmente hondo en la gente por sus características truculentas. Por estos días, la sociedad española no logra salir de su estupor por la muerte de Gabriel Cruz, un niño de 8 años que fue asesinado por su madrastra.
El pequeño desapareció el pasado 27 de febrero a la salida de la vivienda de su abuela paterna en el pueblo de Las Hortichuelas, cuando debía realizar un trayecto de apenas cien metros hasta llegar a otra casa familiar. Tras doce días de incertidumbre, su cadáver fue hallado en el vehículo de Ana Julia Quezada, la pareja del padre de Gabriel.
Las autoridades ya venían siguiendo a Quezada. Se estima que la mujer asesinó a Gabriel el mismo día de su desaparición, luego enterró el cuerpo y más adelante lo desenterró para introducirlo en su automóvil con el fin de trasladarlo a otro sitio. Poco después de ser atrapada, Quezada confesó el crimen.
Ana Julia no solo golpeó y asfixió al hijo de Ángel, su novio: también fingió colaborar con la búsqueda, dio entrevistas mostrándose dolida por la situación y trató de desviar la investigación para conseguir impunidad. Su conducta, por supuesto, generó indignación en todo el mundo.
Varios escritores, en este marco de conmoción, reflexionaron sobre el caso. Isabel San Sebastián, cuando se descubrió el cuerpo de Gabriel, consideró en Twitter que los hechos constituían “otro argumento a favor de la prisión permanente” y, con referencia a Quezada, sostuvo que “monstruos” como ella no deberían “volver a pisar la calle”.
Alexis Díaz-Pimienta, por su parte, comentó en Facebook que la madre de Gabriel es compañera laboral de la madre de su hijo menor y expresó sentirse “desolado” y “completamente destrozado” por el crimen. El escritor dijo que cada vez comprende menos la “naturaleza humana”.
Otros autores fueron más polémicos. Lucía Etxebarría aseguró que el padre del niño asesinado es “responsable” por dejar que su hijo sea cuidado por “una desconocida” y lo acusó de no haber escuchado al pequeño, recoge La Voz de Asturias.
También sorprendió Luis García Montero con una columna publicada en InfoLibre que tituló “Todos somos Ana Julia Quezada”. Allí el poeta, catedrático y dirigente político acusó al “programa” de la sociedad capitalista de promover el “mal”, la “traición” y el “maltrato”, afirmó que los medios pretenden “sacar tajada de la muerte” para sumar audiencias y lamentó que muchos quieran “sustituir el Derecho por la Venganza”, haciendo referencia al clamor popular de un duro castigo para la asesina.
Links relacionados:
https://lawebdelassombras.blogspot.com/2018/03/ana-julia-quezada.html
https://almeria-confidencial.blogspot.com/2018/03/blog-post_27.html
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