María Elena Walsh es recibida por Cristina Kirchner

Mientras los analistas políticos tratan de determinar cuáles son las diferencias entre el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y el de su esposo Néstor, hay una que es evidente: a la presidenta le gusta codearse con escritores y personalidades del mundo de la cultura. De hecho, la primera audiencia oficial de Cristina como presidenta electa fue con el Nobel portugués José Saramago. Incluso antes de ser elegida ya mostraba su simpatía por las reuniones con poetas y novelistas, como cuando visitó a Francisco Ayala en España.

Hoy, Cristina Kirchner recibió en su despacho de la Casa Rosada a la escritora y cantante María Elena Walsh. La poetisa consideró que la presidenta es «una persona muy inteligente y muy agradable», además de agradecer que le haya regalado un libro de fotos de Eva Perón, editado por el historiador Felipe Pigna.

En la dedicatoria del libro, Cristina escribió: “Talento, coraje y pasión por la Argentina”. La mandataria consideró que si Evita y Walsh se hubieran conocido personalmente, el “reconocimiento sería de las dos”.

María Elena Walsh nació el 1 de febrero de 1930 en Ramos Mejía (Buenos Aires). Su carrera literaria comenzó a los 15 años de edad, cuando publicó un poema en la revista “El Hogar”. Al poco tiempo comenzó a escribir en el diario “La Nación”.

Un año antes de egresar de la Escuela Nacional de Bellas Artes, apareció su primer libro: “Otoño imperdonable”, que recibió el segundo Premio Municipal de Poesía. En 1949 fue invitada por Juan Ramón Jiménez a los Estados Unidos y luego se autoexilió en París. Por esa época comenzó a enfocarse en la literatura infantil, donde cosecharía su mayor éxito.

“El reino del revés”, «Cuentopos de Gulubú», “Hecho a mano”, “Juguemos en el mundo”, “Tutú Maramba”, «Canciones para mirar», “Zoo Loco”, “Dailan Kifki” y “Novios de antaño” son algunas de sus principales obras. Entre los reconocimientos que cosechó, fue nombrada Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires en 1985 y Doctora Honoris Causa de la Universidad Nacional de Córdoba en 1990.