Evo Morales versus Editorial Santillana

Tras acusar a la editorial española Santillana de intentar «imponer el colonialismo» en Bolivia, Evo Morales, el presidente de esa nación, hizo público su deseo de reemplazar las publicaciones del mencionado sello por materiales educativos más accesibles y económicos creados por docentes bolivianos.

Para que esta flamante iniciativa genere entusiasmo en los maestros, el mandatario aseguró que el gobierno premiará a aquellos que se animen a producir obras escolares dirigidas a alumnos de la escuela básica, primaria y secundaria.

Tal como recuerda la agencia AFP, esta idea de restarle protagonismo a Santillana había comenzado a desarrollarse en enero, mes en el cual el Ministerio de Educación ya había tomado la decisión de dejar de considerar a los libros de esa editorial como «textos oficiales».

Como era de esperarse, la aprobación del decreto que permite a los docentes elaborar material de consulta estudiantil no tardó en generar polémica.

Para Ricardo Serrano, de El País, no es correcto que el Estado prohíba la comercialización de ejemplares lanzados por un determinado sello sólo por una «simple animadversión», mientras que la autora Micaela Princiotto no dudó en manifestar su disconformidad frente a la descalificación de una empresa sólo por su condición de extranjera. «No es cerrando las fronteras que haremos mejores ciudadanos, cualquier encierro le hace daño a la persona. Sorprende que en el país nos hagamos problema por un texto, cuando la corriente actual habla de una educación virtual», reflexionó.

Por su parte, agrega el diario «Los Tiempos», la psicopedagoga Jacqueline Rocha expresó su desacuerdo con la medida adoptada por el gobierno (a la cual calificó de «extremista») ya que, de acuerdo a su criterio, los textos de Santillana «son los más completos en Historia Latinoamericana».

Sin duda, Bolivia deberá trabajar mucho para demostrar que resulta más enriquecedor trabajar sobre contenidos elaborados en el país y convencer, de esta forma, a las autoridades, docentes y especialistas que no comparten la idea de eliminar de la nación a la editorial Santillana.