Una nueva edición del prestigioso Premio Casa de las Américas ha concluido. Esta vez, los resultados que se dieron a conocer desde La Habana beneficiaron a intelectuales de diversos países, pero fue Argentina la nación que más logros cosechó.
En la modalidad de Teatro, por ejemplo, el jurado decidió distinguir a los argentinos Laura Gutmann e Ignacio Apolo por «El tao del sexo», un material inspirado en el universo de las relaciones humanas que, para los expertos, resultó «audaz y original».
Por su parte, su compatriota Josefina Porcelli tuvo la satisfacción de recibir el premio de la categoría Literatura para Niños y Jóvenes gracias a «Mi hermano llegó de otro planeta un día de mucho viento», una novela de la cual se resaltó su «sensibilidad y acierto narrativo».
Mariela Filkenstein («No te mueras»), Carlos Marianidis («Prohibido soñar») y Ricardo Piglia fueron otros de los escritores que brillaron en este concurso complementado con múltiples actividades que, días atrás, fue inaugurado de forma oficial por el autor uruguayo Eduardo Galeano.
En el resto de las modalidades seleccionadas para premiar, cuenta la agencia EFE, se impusieron Joao José Reis y Flavio dos Santos (Premio Casa de las Américas de Literatura Brasileña por «O alufá Rufino. Tráfico, escravidao e liberdade no Atlántico negro»), el haitiano Gary Víctor (quien sobresalió en Literatura Caribeña en Francés o Creole), la socióloga cubana Zuleica Romay (por «Elogio de la altea o las paradojas de la racialidad») y Cristina Beltrán, quien se quedó con el Premio de Estudios sobre Latinos en Estados Unidos.
Cabe resaltar también que, por la calidad de las 377 obras evaluadas, hubo en este marco varios reconocimientos de carácter honorífico para Humberto Binuesa («Obra cierta, antología poética») y Raúl Bueno, un escritor peruano que captó la atención del jurado con el ensayo titulado «Promesa y descontento de la modernidad».
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