La oración compuesta

Según la cantidad de núcleos verbales que presente, una oración puede ser simple (con un solo núcleo verbal), compleja (con un núcleo verbal principal y, al menos, otro subordinado) o compuesta (con más de un núcleo verbal principal).

La oración compleja es, en realidad, una oración simple en la que al menos uno de sus elementos es una proposición. Por otra parte, la oración compuesta es la que se forma con la reunión de varias oraciones mediante nexos coordinadores o por la pausa de la yuxtaposición (que es una unión sin nexo de elementos contiguos equifuncionales).

En otras palabras, las proposiciones que conforman una oración compuesta pueden vincularse de dos formas: por coordinación o por subordinación.

En las oraciones compuestas por coordinación, los sintagmas están coordinados cuando se encuentran unidos en condición de igualdad (es decir, sin subordinarse uno a otro). Por ejemplo: «Los hombres y las mujeres», «La playa, el mar, el sol, el viento».

Las proposiciones que forman una oración compuesta también están coordinadas cuando están vinculadas en condición de igualdad: «Los adolescentes juegan y bailan».

En cuanto a las oraciones compuestas por subordinación, dos o más sintagmas aparecen subordinados cuando uno presenta un distinto nivel sintáctico que el otro: «Los animales de compañía», «La brisa fresca del mar».

Dos o más proposiciones se encuentran unidas por subordinación cuando se relacionan en condición de desigualdad por tener distinta categoría sintáctica. Una de estas proposiciones recibe el nombre de proposición principal, mientras que la/s otra/s se conoce/n como proposiciones subordinadas.

Las oraciones compuestas por coordinación presentan proposiciones que tienen el mismo nivel sintáctico y que son externas unas respecto de otras. Estas proposiciones pueden estar enlazadas por medio de nexos o sin nexos.

Cuando aparecen enlazadas sin nexos, se llaman yuxtapuestas: «Algunos gritan, otros saltan, los demás callan y miran».