Pronombres átonos

Después de haber presentado y analizado las características de los pronombres numerales, enclíticos, demostrativos, personales y posesivos, llega el turno de hacer referencia a una clase de pronombre personal que se caracteriza por no tener acento fonético y aparecer tanto delante como detrás del verbo al que acompañan y constituir con él una unidad acentual: los átonos.

Antes de dirigir la información hacia las características propias de los pronombres que nos convocan en esta oportunidad, es importante recordar que un pronombre personal es un morfema gramatical sin contenido léxico que, por lo general, está referido a una persona, animal u objeto dentro de la oración. En el plano sintáctico, puede decirse que los pronombres personales pueden dividirse en sintagmas nominales y adjetivales, de acuerdo a las particularidades que presenten.

Ahora que ya hemos dejado en claro el perfil de los pronombres personales, es momento de definir a los átonos. En este sentido, es importante tener en cuenta que este tipo de palabras no puede aparecer aislado, es decir, necesita la presencia de una forma verbal de la cual depende, tal como se puede apreciar en el siguiente ejemplo: «Esta vez no voy a callarme porque no me gusta tu forma de tratarme».

En función de objeto directo, los pronombres átonos le y les adoptan la forma «se» cuando van seguidos de un pronombre de objeto directo. «Le quisiéramos pedir un favor», por ejemplo, es una oración que podría transformarse en «Se lo quisiéramos pedir», al igual que «Para su cumpleaños le regalé un pijama» podría ser reemplazado por «Para su cumpleaños se lo regalé». Por otra parte, cuando está en compañía de verbos pronominales, el pronombre átono actúa como un mero auxiliar para conjugar al verbo en cuestión.

Ejemplos de uso práctico de los pronombres átonos:

«No compres las empanadas. Ya las he comprado yo»
«Me gustaría saber qué es lo que te preocupa»
«Le he revelado algunos secretos»
«Escríbeme en cuanto puedas»
«Te he dicho que no estoy enojada»
«Esos chicos volvieron a olvidarse las llaves en la playa»