Verbos: subjuntivo

La categoría gramatical que interviene en la conjugación de los verbos es conocida como modo. Esta categoría, que se encarga del grado de realidad o de la fuerza ilocutiva de la predicación verbal, puede ser modificada a través de la inflexión del verbo.

El modo subjuntivo es un modo gramatical donde lo expresado por el verbo se manifiesta con marcas que indican pasividad. El contenido de la clase de nexo le otorga el carácter de posible, hipotética, creída, temida, deseada o necesaria a la acción. Por lo tanto, se lo conoce como modo de lo virtual, ya que ofrece la significación del verbo sin actualizar.

En la lengua española, los usos más comunes del subjuntivo son la expresión de deseos («Mi padre quiere que deje la música»), la expresión de duda («No creo que llegue antes que tú»), la expresión de una orden negativa («No grites en la sala») y la aparición en expresiones más o menos fijas («Es probable que consiga el empleo»).

En definitiva, en la oración subordinada, se utiliza el modo subjuntivo siempre que el verbo principal exprese una acción dudosa, posible, necesaria o deseada. Puede usarse, de esta forma, cuando la subordinada depende de elementos rectores que expresan duda («Quizá hayan llegado tarde»)

En los casos en que el verbo regente impone una idea de duda a la oración subordinada, debe aparecer el subjuntivo. Si el verbo principal impone una modalidad asertiva o de certeza, la subordinada debe ir en indicativo. En estos casos, cuando el verbo aparece en positivo, se construye con indicativo («Creo que Miguel vendrá esta noche»), mientras que, cuando aparece en negativo, se construye con subjuntivo («No creo que venga Miguel»). Hay verbos, como «dudar», que se comportan de manera inversa: «Dudo que venga esta noche / No dudo que venga esta noche».