10 El suspiro de un ángel palidece contra el último cielo del poema. Es el suspiro como una diadema que ciñe el horizonte y lo enriquece. Si la luz que no fue desaparece, queda la misma luz, igual problema y la viva presencia del poema que se vierte en tinieblas. Atardece. Muere el ángel. Su canto, su invisible música en la garganta que la entona, y al encontrar el fin se hace posible. El lirio del silencio, embellecido, en sus callados muros aprisiona para este sueño el último sonido. RUBÉN BONIFAZ NUÑO. De otro modo lo mismo, página 16.
Ayer se nubló, llovió y esto fue lo que salió! jajaja No lo dije, ayer estaba triste y no sé la razón a ciencia cierta, entre tanto la tarde se reviste con las pálidas formas; desconcierta. No lo dije, ayer cuando me viste sólo quise dormir - o tal vez muerta-, me hirió la soledad, no lo entendiste, y yo me refugié tras de la puerta. O pensé, no lo sé, pero lo intuyo... No pude controlar mis emociones a cuestas, y por poco me destruyo. Te pido que perdones mi aprensión, cuando te ofendí con mis acciones; vida, lo siento, no era mi intención.♦
Saludos poetisa desde Guerrero Mexico..
Saludos, paisano. 😀
Muy bien correspondido en el saludo. Saludos cordiales.
Qué arrogante, te verías mejor con un vestido de humildad. 🙂 Lástima...
Que lindo que despues de mucho tiempo regreses y me concedas el honor de hacerme tu aprendiz de poeta favorito 😀 Besitos muy amigos.
Gracias por la bienvenida. Un abrazo.
No puedo dejar pasar por alto que un día cuando mis ojos no miraban la luz fuí acunada en la oscuridad del vientre de mi madre. Ojalá que los poemas y homenajes a la mujer no sean solamente un día y quede en el olvido el resto del año. Amore-mío.
Bienvenid@ a Poemas del Alma!
¡Gracias!
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El suspiro de un ángel palidece
contra el último cielo del poema.
Es el suspiro como una diadema
que ciñe el horizonte y lo enriquece.
Si la luz que no fue desaparece,
queda la misma luz, igual problema
y la viva presencia del poema
que se vierte en tinieblas. Atardece.
Muere el ángel. Su canto, su invisible
música en la garganta que la entona,
y al encontrar el fin se hace posible.
El lirio del silencio, embellecido,
en sus callados muros aprisiona
para este sueño el último sonido.
RUBÉN BONIFAZ NUÑO.
De otro modo lo mismo, página 16.
Ayer se nubló, llovió y esto fue lo que salió! jajaja
No lo dije, ayer estaba triste
y no sé la razón a ciencia cierta,
entre tanto la tarde se reviste
con las pálidas formas; desconcierta.
No lo dije, ayer cuando me viste
sólo quise dormir - o tal vez muerta-,
me hirió la soledad, no lo entendiste,
y yo me refugié tras de la puerta.
O pensé, no lo sé, pero lo intuyo...
No pude controlar mis emociones
a cuestas, y por poco me destruyo.
Te pido que perdones mi aprensión,
cuando te ofendí con mis acciones;
vida, lo siento, no era mi intención.♦
Saludos poetisa desde Guerrero Mexico..
Saludos, paisano. 😀
Muy bien correspondido en el saludo.
Saludos cordiales.
Qué arrogante, te verías mejor con un vestido de humildad. 🙂 Lástima...
Que lindo que despues de mucho tiempo regreses y me concedas el honor de hacerme tu aprendiz de poeta favorito 😀 Besitos muy amigos.
Gracias por la bienvenida.
Un abrazo.
No puedo dejar pasar por alto que un día cuando mis ojos no miraban la luz fuí acunada en la oscuridad del vientre de mi madre.
Ojalá que los poemas y homenajes a la mujer no sean solamente un día y quede en el olvido el resto del año.
Amore-mío.
Bienvenid@ a Poemas del Alma!
¡Gracias!
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