Viene la luna en su gala de esfera
vestida de carmesí y arranca
licores de las bocas,
con su sonrisa helada fascina
jovencitas que estremecidas por el derrame
de su primera sangre
aferran contra su pecho un bello narciso
y todo es misterio como si fuera
un sueño como si fuera la muerte
como si fuera mañana
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