Huerta de los repollos, huerta del jiló
huerta de la lectura, huerta del pecado,
huerta de la evasión, huerta del remordimiento,
huerta del escaramujo y del sapo y del pedazo
de cuenco de color guardado por el recuerdo,
huerta de acostarme en el suelo a poseer la tierra,
y de poseer el cielo, cuando la tierra me cansa.
Volver a Carlos Drummond de Andrade
Debes estar registrado para poder comentar. Inicia sesión o Regístrate.