Esteban Echeverría nació el 2 de septiembre de 1805 en Buenos Aires; a los 20 años se fue a vivir a París con el fin de completar sus estudios. Dicho viaje le fue muy provechoso ya que se contactó con las corrientes literarias del momento y se empapó de la literatura inglesa y francesa.
A los cinco años regresó a Argentina y todo lo aprendido durante su viaje lo reflejó en su escritura, siendo el encargado de introducir el romanticismo en las letras del Río de la Plata. Además, se involucró en cuestiones políticas, formulando una doctrina basada en el liberalismo y orientada a resolver conflictos sociales, y en aspectos educativos.
Sus obras han sido indispensables para la divulgación de la vida en las costas del Río de La Plata durante el siglo XIX y entre ellas pueden destacarse "La cautiva" y "El matadero", dos textos escritos en verso que permiten comprender la cotidianidad del Buenos Aires de aquel entonces.
Echeverría falleció en Montevideo en 1851; se encontraba exiliado en Uruguay luego de ser relacionado con los unitarios que intentaron derrocar a Rosas, golpe que se frustró y que desembocó en la persecución a muerte de todos los rebeldes. El aporte que ha hecho a la poesía es indiscutible y su nombre se encuentra íntimamente ligado al de otros grandes poetas sudamericanos, como Estanislao del Campo.