¡Déjenme!
Déjenme columpiar
el despertar de la razón...
Déjenme
Acariciar levemente
la distancia en el viento
y su destierro...
Volver a Haroldo Shetemul
¡Déjenme!
Déjenme columpiar
el despertar de la razón...
Déjenme
Acariciar levemente
la distancia en el viento
y su destierro...