Y sobre aquella especie de amuleto plateado
prendido en su chaqueta,
que me hizo esconder
-era un regalo de ella- a media noche,
no escribir un poema.
Volver a Inmaculada Mengíbar
Y sobre aquella especie de amuleto plateado
prendido en su chaqueta,
que me hizo esconder
-era un regalo de ella- a media noche,
no escribir un poema.