Qué edad, qué frío, qué tormenta
puede ser más terrible
que una noche
a solas,
una noche sin nada, una caverna
olvidada, un pasaje secreto,
de hielo.
Y digo una noche a solas
una noche de tiempo.
Y no hablo de sexo
ni del calor de un cuerpo,
no hablo de alguien, de algo,
hablo de una noche a solas
frente al universo,
en el infinito,
a solas con el cosmos chispeante,
con preguntas fósiles,
con nosotros mismos,
con todo.
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