No llevarás luto por mi, Hija de Puta.
No estarás a mi lado cuando me llegue la hora.
No sentiré tu boca húmeda sobre mi frente y en algún lugar bien lejos, como siempre, te lamentaras de tu suerte y seguirás egoístamente en lo tuyo...
No llevarás luto por mi. Mas sin embargo sentirás, estoy seguro, un gusto amargo en tu boca dulce y tendrás ganas de llorar y no estaré junto a ti para consolarte.
Cuando yo muera Amor, vos no serás Nada.
Te inventé en un agujero negro, para morder el perfume de tu boca y no estar tan solo.
Volver a Jorge Carrol