ADIÓS - Poemas de Manuel María Flores

Adiós para siempre, mitad de mi vida,
un alma tan sólo teníamos los dos;
mas hoy es preciso que esta alma divida
la amarga palabra del último adiós.

¿Por qué nos separan? ¿No saben acaso
que pasa la vida cual pasa la flor?
cruzamos el mundo como aves de paso...
mañana la tumba, ¿por qué hoy el dolor?

¿La dicha secreta de dos que se adoran
enoja a los cielos, y es fuerza sufrir?
¿Tan sólo son gratas las almas que lloran
al torvo destino?... ¿La ley es morir?...

¿Quién es el destino?... Te arroja a mis brazos,
en mi alma te imprime, te infunde en mi ser,
y bárbaro luego me arranca a pedazos
el alma y la vida contigo... ¿por qué?

Adiós... es preciso. No llores... y parte.
La dicha de vernos nos quitan no más;
pero un solo instante dejar de adorarte,
hacer que te olvide, ¿lo pueden? ¡Jamás!

Con lazos eternos nos hemos unido;
en vano el destino nos hiere a los dos...
¡las almas que se aman no tienen olvido,
no tienen ausencia, no tienen adiós!

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Comentarios9

kiko

este es mi ultimo adios
XxX YAsMIn XxX

K diNDO STa esTO jejeje
Elsy Alpire Vaca 9 del 8 de 2014 a las 06:26 Qué hermoso poema, lo he disfrutado, mil gracias.
Luis Alvarez 9 del 8 de 2014 a las 17:33 Es un hermoso poema pletórico de contenidos afectivos, expresados en su mayoría por interrogaciones que, en la estructura superficial, podrían considerarse como retóricas. En realidad, dejan de serlo debido a que las dos últimas estrofas reúnen las respuestas a todas. En el nivel de la forma, también es una joya literaria . Todos sus versos son dodecasílabos. Todos. Hasta segundo verso lo es, aunque aparece marcado como de 13 sílabas, por el que hizo el análisis métrico. En la palabra TENíAMOS no hay hiato gramatical. El autor la concibió para que fuese leída así: te - nia- mos. Ha usado una licencia denominada SINÉRESIS que, como debe recordarse, consiste en pronunciar una sílaba no diptongada como si en realidad lo fuese. Puede darse también en la no unión de la última vocal de una palabra con la primera vocal de la palabra que sigue en el verso. Esta figura es lo contrario de la SINALEFA.
Javier Gamboa Panevel 9 del 8 de 2014 a las 18:45 Hermoso poema al amor eterno, inolvidable. Penas del amor.
Rafael Merida Cruz-Lascano 9 del 8 de 2014 a las 22:33 Hermoso poema,excelsa presentación del tema y una agradable musicalidad.

Gracias por compartirlo
Nhylath 12 del 8 de 2014 a las 02:11 Me encantó leer esta maravillosa "joya literaria"...

"...las almas que se aman no tienen olvido,/ no tienen ausencia,/ no tienen adios"...

(Nota: !gracias al maestro y poeta Luis Alvarez, por su excelente explicación sobre el poema!)
felipe gonzalez mer 18 del 10 de 2014 a las 20:14 Nhylath, de acuerdo estoy,
con el autor y contigo.
El amor eterno terrenal es perenne.
" las almas que se aman no tienen olvido
no tienen ausencia, no tienen adios "
roman cortes 13 del 1 de 2015 a las 21:38 muy lindo

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