Agua pura corría
por el piano.
Dulcemente salía
del cauce de sus manos.
La nostalgia dormía.
Y dormía el Ocaso.
La Música bebía
el agua de su vaso.
Volver a Concha Méndez
Agua pura corría
por el piano.
Dulcemente salía
del cauce de sus manos.
La nostalgia dormía.
Y dormía el Ocaso.
La Música bebía
el agua de su vaso.
Debes estar registrado para poder comentar. Inicia sesión o Regístrate.