Hay una hoja en blanco y una nube arrumbada. La palabra es el intento y el día la frágil continuación de la esperanza. Atravesar el día a través de la palabra es una aventura que no pocas veces termina mal; atravesar la palabra a través del día, es un riesgo que comienza con muy malas esperanzas, aunque hasta ahora no ha vivido nadie para escribirlo.
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