Los Hermanos Álvarez Quintero, llamados Serafín y Joaquín, fueron dos comediógrafos de origen español nacidos en la provincia de Sevilla en los años 1871 y 1873, y fallecidos en 1938 y 1944, respectivamente. A lo largo de varios años, vivieron en la ciudad y trabajaron para el gobierno, al mismo tiempo que realizaban actividades de naturaleza literaria. Poco a poco, consiguieron dedicarse de lleno a la producción teatral. Su primera obra presentada al público fue "Esgrima y amor", la cual lanzó sus carreras como autores dramáticos y les permitió trasladarse a Madrid; allí, comenzó un período muy productivo, que daría títulos como "Blancas y negras", "La buena sombra", "El traje de luces" y "El patio". Si bien sus comedias son la faceta más prominente de su legado, también incursionaron en la zarzuela y la poesía, entre otros géneros, mostrando una gran destreza. A través de "La siesta", así como del resto de poemas con los que contamos, es posible apreciar la versatilidad de estos peculiares escritores.
Serafín y Joaquín Quintero también tuvieron a su cargo trabajos fuera del ámbito creativo, tal como su participación de la Real Academia, y recibieron diversos honores, entre los que destaca el título de Hijos predilectos a nivel provincial.