No destrozada nave en roca dura
Tocó la playa más arrepentida,
Ni pajarilla de la red tendida
Voló más temeroso a la espesura;
Bella ninfa la planta mal segura
No tan alborotada ni afligida
Hurtó de verde prado, que escondida
Víbora regalaba en su verdura,
Como yo, Amor, la condición airada,
Las rubias trenzas y la vista bella
Huyendo voy, con pie ya desatado,
De mi enemiga en vano celebrada.
Adiós, ninfa crüel; quedaos con ella,
Dura roca, red de oro, alegre prado.
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