Poemas de Nora Méndez
- Acción de gracias
- AnaMaría
- Atravesarte a pie toda la vida
- Balada del adiós
- Cantata de la poeta
- Casa con visita nocturna
- Desencuentro con encuentro
- Ecos
- El nuevo orden
- Entre papeles
- Era una
- Ese animal
- Fe
- Gestación
- Historia
- Improvisaciones para volver
- La estación de los pájaros (I)
- La estación de los pájaros (II)
- La estación de los pájaros (III)
- La hora del amor
- Locura
- Los Patriarcas
- Mi casa
- Nace de una pared
- Nacimientos
- Paisaje de domingo
- Para amar
- Parafraseando a Sabines
- Poema muro
- Pronunciamiento
- Salmo de la elegida
- Tatuajes
- Tiempo
- Tránsitos
- Tríptico
- Welcome to Honduras
Seleccionamos del listado de arriba, estos poemas de Nora Méndez:
Fe
Sobre azul pelaje de unicornio
Vamos tres haciendo cruces
Templando el remo incansable de la vida
Sobre huraños acantilados
Iris cautivado
Sobre el vuelo de garzas blancas
Con memoria de picos muertos
En el preámbulo de los altares
En ese cofre imaginario
Encontrarás listones
y pequeñas frases que murmuran
Son el delicado tesoro de los que esperan
Una carta sin respuestas
Pero con la inconfundible voz
Atravesarte a pie toda la vida
Hoy amanecí como la mañana
Empapadita y con olores.
Soy mariposa-mujer
Saliendo del escondite en pleno invierno,
Cargada de inefables
Soterrados por el llanto.
Hoy amanecí como la mañana
Con ganas de despertarme todo
¡ que venga la vida
que se encabrone conmigo
como yo lo estoy con ella!
Hoy amanecí como la mañana
Con poca luz y con ganas de que me vean,
Con ganas de rociarme en tu rocío
Con ganas de sacudirme la tristeza
Y de subir como enredadera
Hasta la palabra sincera
Y atravesarte a pie toda la vida.
Hoy amanecí como la mañana
Sin pájaros, mojada
Pero con mucha sed.
Balada del adiós
Bajo el muérdago de estos días
Voy y beso tu recuerdo
Camino parca sobre la ola de tu tiempo
Y me astillo el andar
En rito animal
Aúllo
Golpeo la roca
Me arranco el pelaje
Escribo tu nombre en fragilidad de arena
Acorralándolo en corazones rotos
Sigo a diario la trayectoria
Solitaria de la Luna
Alumbrando tersa la margarita
Que indecisa me confiesa al fin
Que no me quieres
Créeme si te digo
Que soy la cueva de tu ayer
El animal sumiso
Que repite los juegos aprendidos
Que ladra ante las sombras desconocidas
Que se echa todas las noches a esperarte
¿Para qué quiero ser civilizada?
Si después de todo
Es mi animal el único
que todavía quiere acostarse contigo...
Mi casa
La inauguro a diario
Bajo la cascada y el gallo
Cambiantes los vecinos
Alguna vez fueron buenos
Sin cajita para el gato
Excéntrico pasea suelto
Con las aspas del ventilador
Y las colas de ardillas verdes
Paredes modelando en blanco hueso
Platicando con olores en las distintas posturas del día
Abren y cierran ventanas cristalinas
Por donde pasan largas colas en triciclos descalzos
y las iguanas cholcas que de carcañales saben
La cama barre
La cocina duerme
El timbre huye tras las calcomanías
De un taxi...
El jardín aún no ha sido inaugurado
Las flores han llegado
Arrastradas por el aire
Mi casa es sencilla
Como sonrisa del algodón
Que al mojarla se deshace
Mi casa es mi cuerpo
Totopostes híbridos
Puentes movedizos
Donde sola me duermo
Y día a día resucito.
Locura
Cariñosa me sonríe
desde lejos
Mientras la tristeza incandescente
Advierte
Push the door
Only emergency
En las calles lloriquean parabrisas
La ajada mugre de los años
Ha desatado rieles en la intempestiva holgura
Miro en el presagio de la luz entumecida
Las caries insensatas del orgullo
Mientras mis hermanos
Pulen la loza de gusanos divisores
La colección de arañas del potrero
Y tus manos acomodan
El desorden de la nada
Ciega he cruzado mis ojos
Y mansa fluyo en húmedo paso de caracol
Oigo el ruido de los pozos
Siempre supe que el agua
Mordería el pan
Para amar
Sube al atlas del reloj
Y date cuenta de su paso
Mira bien las apariencias
Son los miedos exaltados
Te tocará convivir con ellos
Todo lo que dure el viaje
Extiende rotundos los brazos
Recibe una a una las direcciones del dolor
Únete a la tormenta,
Inequívocos en ti
Van los rumbos de los peces
Y el aleteo de la red
Coloca espejos en tus hombros
Así sabrás de tus rivales
Recuéstate en la hierba
Y escucha el leve paso de los suspiros
Como en la guerra
Los detalles te mantendrán vivo
Siéntete pequeño
Muy pequeño
Solo así sabrás
La dimensión exacta
En la que el amor
Te ha colocado